La ex concejal recordó que la idea comenzó a rondar en Tandil alrededor del año 2000, cuando “junto a la entonces senadora Cristina Azcueta convocamos a Tandil al prefeito de Porto Alegre, Raúl Pont, para que nos ofreciera detalles sobre la implementación del presupuesto participativo que esa ciudad aplicaba. Esa jornada de trabajo se desarrolló en la Unicén y estuvo presente el hoy diputado nacional Claudio Lozano, entre otros dirigentes”.

Agregó que “como tengo buena memoria, recuerdo que el senador Carlos Fernández y el presidente de la UCR, Julio Elichiribehety, viajaron en su momento a Brasil para interiorizarse de la experiencia del presupuesto participativo y formaron parte de las asambleas ciudadanas. Quizás ellos lo olvidaron, pero yo no. Aplaudo que se haya tomado la decisión de aplicarlo en Vela y Gardey, pero ¿por qué no extenderlo a los barrios de nuestra ciudad?”.

La ex presidente del Concejo Deliberante entre 2003 y 2007, fue autora de un primer proyecto de ordenanza “donde se solicitaba al Ejecutivo, que se llevara adelante un plan piloto de presupuesto participativo, que es una herramienta excelente para una verdadera política de descentralización. Lo ideal sería que los vecinos de distintos puntos de la ciudad sean los encargados de decidir cuáles son las obras prioritarias para cada lugar”.

Fernández, quien en las próximas elecciones legislativas acompaña a Mario Bracciale en la lista de Unidos por la Libertad y el Trabajo de Tandil, reconoció que “le agradó mucho” la implementación del presupuesto participativo en Vela y Gardey, aunque remarcó que “sería apropiado elevar los montos que se asignan, para poder realizar obras de infraestructura. Si bien la gente de esas localidades es la que elige qué obras priorizar, también es cierto que los fondos asignados acotan el margen de decisión. A mayores partidas, los vecinos van a poder pensar en obras más importantes”.

En ese sentido, la empresaria gastronómica anticipó que “vamos a proponer replicar esta herramienta de gestión en distintos barrios y zonas de la ciudad, donde los vecinos, a través de asambleas ciudadanas, decidan qué destino darle a los recursos municipales. Además, va a ser una forma de ejercer un mayor control popular sobre los fondos públicos”.

Por último, aseveró que “vamos a pelear desde el Concejo Deliberante para afectar un porcentaje del presupuesto asignado a la Secretaría de Obras Públicas, con el objetivo de que sean los vecinos los que decidan qué obras realizar”.