Se multiplican los basurales en la ciudad de La Rioja

Se multiplican los basurales en la ciudad de La Rioja

Una vez más la falta de recolección de residuos pasa a ser un problema de salud pública.

Un vecino sube a sus redes la foto de la puerta del CEPAR Norte repleta de basura quejándose del olor, los vecinos del barrio Antártida mandan fotos a los medios de los baldíos convertidos en basurales que abundan en su barrio, en barrio 20 de Mayo los vecinos alertan que un puente está a punto de caerse por la acumulación de basura.

Las imágenes de la ciudad infestada de basura son habituales al igual que las calles destrozadas pasaron a ser parte del paisaje urbano de los barrios de la capital.

El ministro de Salud, Juan Carlos Vergara, ya advirtió su preocupación por los microbasurales, explicando los problemas de salud pública que esta situación deriva. "Si se deja la basura en la calle, en lugares que no son los apropiados, en lugares que no corresponde, como sitios baldíos, se generan focos infecciosos y esto trae problemáticas para la salud porque empiezan a aparecer los vectores como roedores, las moscas, cucarachas”, manifestó.

Hace unos días el director de Epidemiología, Eduardo Bazán, junto con el presidente del Instituto de Servicios Ambientales, Christian Albrecht; y el técnico en Laboratorio a cargo del Área de Artrópodos y Animales Ponzoñosos, Cristian Bizotto; brindaron una conferencia de prensa en la que pidieron el acompañamiento de la comunidad para el control de la enfermedad a partir de la eliminación de cacharros y potenciales criaderos del mosquito Aedes Aegypti, transmisor del virus del dengue. Aunque no hay casos en la provincia, el Gobierno intensificó las medidas de vigilancia ante brotes que hay en el resto del país. 

Un conflicto recurrente

No es la primera vez que la ciudad capital padece la masiva acumulación de basura. En el conflicto por los reclamos salariales de los recolectores en el 2021, la situación se volvió insostenible para los vecinos de la capital, gobernada por la intendenta de Juntos por el Cambio, Inés Brizuela y Doria. En aquella oportunidad los cruces partidarios soslayaron la situación medioambiental. El ex presidente Macri acusaba en redes sociales al Gobernador de la provincia por los reclamos de los trabajadores municipales, mientras los ciudadanos sometidos al caos de una ciudad infestada de basura padecían las consecuencias. 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que la acumulación de basura en las calles de una ciudad puede tener consecuencias graves para la salud pública y el bienestar de la población. Señala que convivir con basura en las calles puede aumentar el riesgo de diversas enfermedades para las personas que viven cerca de ella. Algunas de las enfermedades que se pueden propagar a través de la basura incluyen las gastrointestinales: “la basura atrae a roedores y otros animales portadores de enfermedades que pueden propagar bacterias y virus que causan enfermedades gastrointestinales, como la salmonelosis, la fiebre tifoidea, la gastroenteritis, entre otras”, advierten.

La OMS también alerta del riesgo que implica en propagar enfermedades respiratorias, ya que su descomposición en condiciones inadecuadas puede generar gases tóxicos y partículas en suspensión que pueden afectar la salud respiratoria, causando enfermedades como asma, bronquitis, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), entre otras. Por otro lado, se aumenta el riesgo de enfermedades infecciosas transmitidas por vectores ya que la basura puede ser un hábitat ideal para los insectos vectores que transmiten enfermedades como el dengue, la fiebre amarilla, la malaria, entre otras. Además no hay que minimizar los riesgos de lesiones y cortes, ya que la basura en las calles puede incluir objetos filosos y peligrosos que pueden provocar lesiones.

Por estas razones, la OMS recomienda que las ciudades implementen programas de gestión de residuos sólidos efectivos para prevenir la acumulación de basura en las calles. Esto incluye la recolección y eliminación adecuada de la basura, la promoción de prácticas de reducción y reciclaje de residuos, la educación de la población sobre la importancia de la gestión adecuada de residuos y la implementación de sanciones para aquellos que arrojan basura en lugares públicos. 

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