Molinos, la otra gigantes alimenticia que terminó el año con ganancias

Molinos, la otra gigantes alimenticia que terminó el año con ganancias

Molinos, la compañía de los Pérez Companc, presentó un balance positivo por $1.680 millones.

La alimenticia Molinos cerró el balance anual con ganancias por $1680 millones de pesos.

Así, confirmaron otro año más de ganancias de una de las alimenticias más grandes del país.

Es que la empresa de los Pérez Companc no para de aumentar el precio de sus productos, incluso por encima del promedio inflacionario anual.

Eso es lo que se refleja en los balances de las principales empresas de alimentos.

Ello, a pesar que incumplen condiciones laborales, controles sanitarios, y presionan paritarias a la baja.

 

Ganan, ganan y ganan

Al igual que la mayoría de las empresas gigantes del sector alimenticio, Molinos Río de la Plata declaró ganancias en 2020.

Así lo había hecho antes la alimenticia Arcor, y lo mismo reportó Mastellone.

Es que en un contexto de adversidad económica son las que siguieron obteniendo beneficios y aumentando precios.

Ello, a pesar que hubo congelamiento de tarifas y estabilidad cambiaria.

Si bien su último balance general correspondiente a los primeros nueve meses del año reporta una ganancia contable de $1680 millones, se trata de un resultado positivo alcanzado gracias a la venta de sus oficinas centrales ubicadas en la localidad bonaerense de Victoria.

La transacción le permitió reportar en su balance un resultado positivo extraordinario de $1.821 millones.

Ello se desprende del informe que Molinos envió a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.

Allí sus ingresos operativos alcanzaron los $33.375 millones entre enero y septiembre, marcando un crecimiento del 9,4% respecto a igual período anterior.

 

Un «año complejo»

Fuentes cercanas a la compañía aseguraron que Molinos viene atravesando «un año complejo».

La patronal afirma dificultades que trajo la crisis sanitaria del Covid-19.

Molinos con ganancias extraordinarias a pesar de la pandemia

 

Pero, además, acusa «un constante aumento de sus costos, en especial las materias primas».

La empresa que no para de subir el precio de sus productos afirma que «no pudieron ser trasladados a los precios».

 

Incumplimientos

A pesar de las ganancias Molinos es una de las empresas con mayores conflictos con los trabajadores.

Ello, en principio, por incumplimientos en las medidas de seguridad de las plantas alimenticias.

Pero, además, en salarios y pagos retrasados a los trabajadores del sector.

Es por eso que el Sindicato de la Alimentación (STIA) mantuvo conflictos con la empresa durante todo el 2020.

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