Para un abogado es un orgullo inmenso de alguna forma ser el abogado de tu provincia". Con ese sentimiento juró Ricardo Aníbal Antonio Endeiza como fiscal de Estado. Esta tarde en la Sala de Situación de Terrazas del Portezuelo, el dirigente deportivo y directivo de una de las sociedades estatales SAPEM comenzó a escribir un nuevo capítulo en el organismo que defiende los intereses del Gobierno, tras casi seis años de gestión de Eduardo Allende.

El gobernador, Claudio Poggi, le tomó juramento y así cerró el círculo que comenzó hace ocho días cuando se conoció la renuncia de Allende y el nombre del reemplazante propuesto por el mandatario. Pero la designación debía pasar por el Senado para adecuarse a la ley y también esperar el regreso de la máxima autoridad provincial de México para concretar el acto de asunción.

Endeiza admitió a El Diario de la República que recibió el ofrecimiento del cargo del propio Poggi, cuando ya había vuelto de vacaciones y estaba de nuevo en actividad. "Acepté gustoso el desafío", dijo sobre la respuesta que derivó en que el Ejecutivo convocara a extraordinarias en la Cámara alta y enviara el pliego con sus antecedentes.

"Siento orgullo porque yo he nacido y me he criado aquí, pero al mismo tiempo es un desafío inmenso", resaltó quien egresó como abogado de la Universidad Nacional de Cuyo con sede en Mendoza.