Este lunes, el Consejo General de Guerra que investigó durante cuatro meses la responsabilidad de ocho altos oficiales de la Armada en el hundimiento del submarino ARA San Juan, difundió los resultados de su indagación. 

Así, el ex jefe de la Armada Marcelo Srur fue sancionado con 45 días de arresto riguroso por haber informado los hechos en forma “incompleta” al Ministerio de Defensa, “impidiendo de esta forma también proporcionar información a los familiares de los tripulantes, con el agravante de no comparecer ante la opinión pública demostrando falta de compromiso y diligencia".

El contraalmirante Luis Enrique López Mazzeo, por su parte, recibió 60 días de arresto riguroso en virtud del procesamiento que rige en su contra en la causa penal.

Además, se le sumaron 15 días más por "no haber dado cumplimiento a la orden impartida por el Jefe de Estado Mayor General de la Armada, de no ausentarse de la sede de su Comando juntamente con su Oficial de Operaciones, pese a estar en conocimiento de la avería inicial del submarino"; y otros 10 por “haber informado en forma tardía la novedad que le fuera transmitida respecto de la avería al Jefe de Estado Mayor General de la Armada". Para aplicación de la pena, se tomará la de mayor duración. 

El capitán de navío Claudio Javier Villamide fue destituido, al ser considerado “negligente en su accionar al evidenciar falta de cuidado o descuido de la tropa y equipamiento a su cargo, al no haber ordenado ni recomendado expresamente al Comandante del ARA San Juan la conveniencia de permanecer en superficie por un período limitado" y por no adoptar medidas "a fin de brindar un apoyo eficaz a la Unidad".

El capitán de navío Héctor Aníbal Alonso fue sancionado con 30 días de arresto riguroso por “no haber constituido en la sede del Comando de la Fuerza de Submarinos ni haber convocado de inmediato a los integrantes del Estado Mayor, a los fines de analizar la situación y prestar asesoramiento al Comandante"

También recibió 30 días de arresto riguroso el capitán de fragata Hugo Miguel Correa en virtud del procesamiento dictado en la causa penal.

Mientras tanto, el contraalmirante Eduardo Luis Malchiodi fue absuelto, en virtud de la falta de mérito decretada en la causa penal, al igual que el capitán de corbeta Jorge Andrés Sulia. El capitán de navío Carlos Ferraro fue beneficiado con la extinción de la acción disciplinaria.

Según refleja Infobae, uno de los principales factores que tuvo en cuenta el tribunal en su fallo es el supuesto estado del submarino San Juan antes de zarpar.

En ese sentido, si bien la Armada sostiene que la nave se encontraba apta para la misión pesar de una serie de tareas pendientes en su mantenimiento, el tribunal consideró que presentaba fallas, faltantes y averías que ameritaban suspender el viaje.

El tribunal también consideró lo sucedido en la reparación de media vida que el San Juan realizó entre 2010 y 2014 para imputar al responsable de la tarea, capitán de navío Carlos Ferraro, por haber elegido instalar en el submarino un sistema de sensores de gases no adecuado para el uso militar. El oficial, sin embargo, se benefició con la prescripción de los cargos en virtud del tiempo transcurrido.