El vicegobernador Osvaldo Jaldo se desligó ayer de las polémicas declaraciones del oficialista Reneé Ramírez. El fin de semana pasado, el gremialista aseguró que maneja $150.000 por mes para gastos sociales y que el monto no le alcanza. El titular de la Legislatura, en rueda de prensa, desmintió al integrante del bloque Tucumán Crece.

“El legislador que pueda hacer ese tipo de declaraciones corre por su cuenta, pero ninguno percibe el concepto de ayuda social; toda ayuda es canalizada por la vía que corresponde por Presidencia”, manifestó Jaldo. Y aseguró que el sistema “está en debate”.

El vicegobernador valoró la importancia de que “se discutan todos los temas”. “Veo con agrado que se haya tratado este asunto en el recinto”, dijo. Fue consultado sobre los informes solicitados por la Justicia debido al manejo de los recursos públicos para subsidios. “Somos muy respetuosos de la Justicia provincial y de la Federal. Cuando se nos pide información estamos contestando de inmediato”, aseveró.

Le preguntaron luego por el macrista Luis Brodersen, quien aduce que renunció a los gastos sociales. “Bueno, él va teniendo varias actitudes. Una, que ha renunciado (a esos fondos), pero también presentaciones judiciales donde consulta si son legales o ilegales, porque quiere saber para cobrarlos o no. Que defina una postura”, indicó Jaldo. Y marcó que el sistema “es legal” y funciona hace más de 20 años. Sobre la advertencia de que el 40% de los fondos anuales de 2015 ($ 615,6 millones) fueron ejecutados como subsidios. “Capaz que era necesario gastar ese porcentaje. Está documentado, aprobado no sólo la partida presupuestaria sino también la ejecución, además con las acordadas correspondientes (del Tribunal de Cuentas) y sus respectivas aprobaciones”, finalizó.

Defienden los gastos

Por su parte, la mayoría de los legisladores que aludieron al asunto tomaron distancia de las declaraciones del manzurista Reneé Ramírez, quien había dicho días atrás que maneja $ 150.000 al mes para ayudas sociales, y que con ese monto no le alcanza para satisfacer todos los pedidos que recibe. De todas formas, hubo oficialistas y opositores que justificaron la existencia de un régimen para contener las demandas de los vecinos. Coincidieron en que el mecanismo vigente puede ser revisado y reemplazado por otro más “transparente”.

Luis Brodersen (bloque PRO-A), en tanto, mantuvo su postura contraria a que el Poder Legislativo reparta dinero para subsidios. Fue incluso más allá, y habló de “gastos inconfesables”. Por eso, anunció la presentación de un proyecto de ley para eliminar esa partida presupuestaria y reintegrar los fondos a la Provincia. “También se puede disfrazar este sistema, pero es largamente repudiado por toda la sociedad”, ironizó.

El peronista Fernando Juri pidió la palabra en el período de Manifestaciones Generales para ejercer “su derecho a defensa” sobre los gastos sociales. Aseguró que cuando fue vicegobernador (2003-2007” el tema “también fue cuestionado”. Y aclarando que no hablaba en nombre de sus pares, agregó: “yo no me hago cargo si algún legislador o alguien da mal uso a esa ayuda económica; yo no lo hago y tengo la seguridad de que la mayoría de los legisladores tampoco lo hacen. Porque acá hay normas, tenemos que rendir cuentas; está el Tribunal de cuentas. Yo no me llevo plata a mi casa, yo cobro mi dieta; si alguno lo hace corre por su cuenta y responsabilidad. Yo no lo hago”. Luego aseguró que tenía planillas con las rendiciones, aunque se mostró abierto a modificar el sistema. “No sé qué mayor transparencia podemos darle, pero hagamos todo lo que sea para mostrarle a la gente con mayor claridad (el manejo de recursos)”, destacó el ex vicegobernador.

Brodersen aludió luego a las “sinceras declaraciones” de Ramírez (este jueves no opinó sobre el tema), y marcó que el peronista había dicho que la rendición de gastos “está en la conciencia de cada legislador”. “El Estado puede ayudar, pero no el parlamentario tal o cual”, agregó el opositor.

Pero Guillermo Gassenbauer, vicepresidente 1° de la Cámara, le salió al cruce. Lo acusó de arrogarse la representación “de toda la sociedad” y garantizó que muchas personas pudieron sortear graves problemas con esos subsidios. “Pero no hay nada más perfectible que una ley; si la Presidencia (por Osvaldo Jaldo) y quienes estamos acá creen que se terminó esta asistencia, está bien; pero si alguien cree que es por una nota periodística se está confundiendo”, añadió.

Luego, la oficialista Silvia Rojkés cargó contra los legisladores que llevan planteos a la Justicia. “Si no estamos de acuerdo, demos un debate político; no un debate judicial”, sostuvo la ex funcionaria. No hizo una mención específica, pero entre sus pares sólo Brodersen y el radical Eudoro Aráoz iniciaron demandas por los gastos sociales.

El jefe del bloque oficialista Tucumán Crece, Ramón Santiago Cano, también pidió la palabra. “Cuando uno solicita una ayuda para tal persona o tal entidad, más allá de la tarea legislativa que hacemos, es para devolver a la gente lo que la gente nos ha dado. Somos bendecidos al ocupar estas bancas”, destacó. Aclaró que reciben innumerables pedidos. “Y más aún los que hacen lo que se denomina ‘territorio’”, añadió.

El vicepresidente 2° de la Cámara, el radical Ariel García, señaló que, como en la provincia los índices de pobreza son elevados, también surgen diversas demandas sociales. “Ahí es donde tiene que estar la política para dar una respuesta”, enfatizó el vicepresidente local de la UCR. Pero consideró que las críticas al régimen de subsidios son una buena oportunidad para iniciar la reforma política. “Tenemos la obligación moral de darle la mayor transparencia posible”, agregó. Y luego le dedicó a Brodersen una versión de la fábula de la rana y el escorpión. Recordó que el reptil estaba ayudando al arácnido a cruzar un río sobre sus espaldas, cuando sintió el pinchazo del aguijón desde atrás. “Mientras la ranita se hundía, le preguntó: ¿por qué lo hiciste? Y el escorpión contestó: porque es mi naturaleza. Valga esta reflexión para quienes quieren ser el escorpión de esta Legislatura y creen que se van a salvar clavando un aguijón”, concluyó el líder “Boina Blanca”.

Alfredo Toscano, del bloque Peronismo del Bicentenario, expresó que los gastos sociales “están dentro de la ley”, aunque se mostró a favor de buscar un régimen alternativo al actual. Y se sumó a las críticas a Brodersen. “Acá hay legisladores que, por esas circunstancias de la vida, ocupan una banca. Los respeto porque los votó la gente; pero no como político, porque quien denosta la actividad política desde la política es un sinvergüenza”, afirmó el dirigente afín al intendente Germán Alfaro. Allí se cerró la lista de oradores. Pero todo indica que el debate continuará durante un tiempo, fuera del recinto.