De acuerdo un informe de Mar del Plata Entre Todos, el año pasado se profundizó la pérdida de bienestar económico por la pandemia, aunque los niveles de desigualdad se mantuvieron.
Se trata de un documento elaborado por el Doctor en Ciencias Sociales, Eugenio Actis Di Pasquale y consiste en un análisis de la evolución en la distribución de ingresos y la pobreza en Mar del Plata durante el período comprendido entre 2014 y 2021.
El diagnóstico se realizó destacando las dos etapas más recientes, la PREPANDEMIA de 2016 a 2019, considerada un período de ajuste macroeconómico, endeudamiento y liberalización financiera. Y por otro lado, la PANDEMIA de 2020 a 2021, lapso en el que se implementaron un conjunto de políticas de protección social y del empleo frente a la irrupción de la pandemia por COVID-19.
La fuente de datos para los indicadores estimados fue la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Los cálculos se realizaron con los segundos y cuartos trimestres de cada año, de acuerdo con las recomendaciones del INDEC (2017) respecto a la estacionalidad que presentan las estadísticas de ingresos.
El texto se divide en dos secciones. En la primera, se analiza la evolución de la distribución de ingresos a partir de un conjunto de indicadores ya utilizados en el Segundo Informe de Monitoreo Ciudadano, tales como el Índice de Gini (IG), el Índice de Palma (IP), la Curva de Lorenz (CL), la Curva de Lorenz Generalizada (LG), la estructura distributiva por deciles de ingresos, la proporción de personas que viven por debajo de la mediana y del primer cuartil de ingresos. Estos últimos en correspondencia con el ODS 10 sobre Reducción de las desigualdades. La variable utilizada en todo este análisis es el ingreso percápita familiar.
En la segunda sección se observa la evolución del porcentaje de personas que viven en hogares cuyos ingresos se encuentran por debajo de la línea de pobreza e indigencia en Mar del Plata en el período 2014-2021.
Una de las herramientas utilizadas, el Ídice de Gini, indica la distancia promedio entre las rentas de todos los individuos de la sociedad. Mientras más cercano a cero el índice, menor es la desigualdad en la distribución de ingresos. El informe arroja que la desigualdad empeoró y posteriormente se recuperó en tres momentos, con las medidas de política implementadas en 2016, con la recesión instalada desde mediados de 2018 y con el primer año de pandemia.
Por otro lado, la Curva de Lorenz relaciona el porcentaje de ingresos acumulado que corresponde a cada percentil de población. Durante la pandemia, se pudo ver que hubo una profundización de la desigualdad en 2020 y una posterior recuperación durante 2021.
Sin lugar a dudas, este deterioro reflejado en el informe sobre la distribución del ingreso y del bienestar económico, tiene un mayor impacto en los sectores que se encuentran en los niveles más bajos de ingresos. En este sentido, el análisis del nivel de pobreza e indigencia de los marplatenses resulta una información complementaria y sustantiva.
En cuanto a otros indicadores que dan cuenta del deterioro distributivo, el aumento de personas con ingresos por debajo de los umbrales de la proporción de personas que viven por debajo del 50% de la mediana de los ingresos, y el porcentaje de personas que viven por debajo de la mediana
de los ingresos, fueron sustantivos en la etapa prepandemia, manteniéndose o incluso reduciéndose luego del primer año de pandemia.
Durante la pandemia, con la disminución de puestos de trabajo y el persistente aumento de precios, se generó un aumento sustantivo de la pobreza e indigencia. En el segundo trimestre de 2020 la pobreza alcanzo al 41% de la población (265.600) y la indigencia al 10,8% (69.900). Luego en 2021, junto con la recuperación de la actividad económica y el conjunto de programas implementados para amortiguar la crisis, tanto la pobreza como la indigencia disminuyeron a niveles prepandemia, aún con el sostenido aumento del nivel general de precios. En el segundo semestre de 2021, el porcentaje de personas que viven en hogares pobres se ubicó en el 31,5% (205.300) y el que vive en hogares indigentes, 7,5% (50.000).
Para continuar leyendo el análisis, accedé al informe.
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