La justicia quiere saber si existió algún tipo de impericia o mala práxis por parte del grupo de médicos y profesionales que atendía a Diego Armando Maradona, en sus últimos días de vida. En especial, se posó sobre el rol que ocupaba su médico personal, Leopoldo Luque.

Por eso, el juez de garantías de San Isidro, Orlando Díaz, ordenó dos allanamientos que relacionan al médico: uno en su clínica privada y otro en su domicilio. Hasta ahora, tanto Luque como la médica psiquiátrica había sido los únicos que no se acercaron a declarar y tampoco habían sido citados por el fiscal de la causa.

"En virtud de la prueba que se fue recabando se consideró necesario solicitar allanamientos en el domicilio y consultorio del médico Luque. Si se confirman las irregularidades en la internación de Maradona se podría estar ante el delito de homicidio culposo", explicaron los informantes consultados por el diario La Nación.

La muerte del Diez todavía conmociona a todo el país y gran parte del mundo, pero hasta ahora se había encontrado algún tipo de explicación lógica de su fallecimiento debido al avanzado deterioro físico que se observaba en el ex jugador y técnico de Gimnasia. Sin embargo, corrían rumores de una sobremedicación por parte de su equipo médico, denuncian que se relacionaban a su vez con una supuesto aislamiento forzado hacia sus hijas y familiares más cercanos.

Ahora, la justicia impulsó una investigación para determinar si existieron motivos que pudieran explicar que los médicos, en especial Leopoldo Luque, tuvieran que ver con una muerte evitable.