En un escenario en el cual la baja estacional en la producción de leche se ha visto agravada por las fuertes lluvias de febrero, el Gobierno ha puesto la lupa sobre el alimento. Ante el temor de que una menor oferta de materia prima pueda impactar en el precio de los lácteos, la Secretaría de Comercio Interior decidió frenar las exportaciones desde comienzos de febrero.

Afligidas por esta situación, las industrias concurrirán el miércoles a una reunión convocada por el secretario de Comercio Interior, Augusto Costa, en la que se analizará el escenario exportador a futuro.

A través de un comunicado, el Centro de la Industria Lechera, entidad que agrupa a las empresas del sector, informó que se mantendrán las exportaciones a un ritmo similar a los primeros meses del año pasado, en coincidencia con la estacionalidad de la producción de leche. De cumplirse ese pronóstico, durante el presente mes el Gobierno debería autorizar embarques por 10.500 toneladas de leche en polvo. Si se tiene en cuenta la totalidad del mix de productos exportados, el volumen debería llegar a 25.400 toneladas.

Efectos del freno

Con una cotización internacional de la leche en polvo muy firme (el último remate de la empresa neozelandesa Fonterra registró un precio de 4.999 dólares la tonelada), y ayudado por la mejora en la competitividad del tipo de cambio, el negocio exportador muestra buenos márgenes.

A pesar de la caída estacional en la producción, desde la industria se asegura que hay leche suficiente para mantener abastecido el mercado interno y poder cumplir con los compromisos al exterior, que se llevaban actualmente sólo 20 por ciento de la producción.

La paralización de las exportaciones podría interrumpir el ciclo de recuperación que transita el precio de la leche que recibe el productor. Por su incidencia dentro de los ingresos de las empresas, las exportaciones son el principal sostén en precio de la materia prima. “Con el discrecional cierre de las exportaciones de productos lácteos se cierran también las pocas esperanzas que le quedaban al productor de poder sacar adelante la grave situación económica y financiera que atraviesa”, advirtió la Mesa de Enlace nacional.

Para los dirigentes agropecuarios, nunca estuvo en juego el abastecimiento de la mesa de los argentinos ya que, en los últimos 21 años, Argentina registra una producción con excedentes y un nivel de consumo por habitante similar al de los países más desarrollados.

Los productores sostienen que si la intención oficial es que las exportaciones para el presente año sean similares a las registradas en 2013, la medida significa un freno para la actividad. Precisamente, el Gobierno había fijado como meta para el ciclo 2014/15 que la producción nacional de leche creciera siete por ciento. El objetivo comercial era alcanzar exportaciones por un total de 1.940 millones de dólares, 12,8 por ciento más que el año pasado, cuando aportaron 1.720 millones de dólares.

36% de mejora

Precio internacional. El último remate de Global Dairy Trade, la plataforma comercial de la empresa neozelandesa Fonterra, marcó el 18 de febrero pasado un valor para la leche en polvo de 4.999 dólares la tonelada. La cotización muestra una mejora de 36 por ciento respecto a 12 meses atrás (3.654 dólares).