La Ley N° 1.401-J que promueve en la provincia el fraccionamiento de vinos en origen y otorga créditos fiscales a bodegueros y pequeños productores que se sumen a la ola fraccionadora, ya está vigente.

Desde la Cámara de Bodegueros de San Juan aseguraron que en el sector hay gran expectativa por esta medida, que fue muy pedida, y que esperan que sume muchos nuevos fraccionadores y nuevos vinos sanjuaninos en el mercado. Los efectos de la ley, señalaron, podrán verse recién después del primer semestre del año.

Los créditos fiscales, que se entregarán en valores escalonados (más valor para los más chicos), servirán para pagar impuestos provinciales y podrán ser transferidos.

"La ley fue muy bien recibida y hace tiempo se esperaba su puesta en vigencia. Se trata de una ley que reemplaza una vieja, no sólo actualiza las cifras del beneficio sino que simplifica su aplicación. Da oxígeno sobre todo para las bodegas pequeñas ya que los aportes son escalonados. San Juan tendrá más presencia en el mercado con más cantidad de marcas y productos, y sumará valor a las bodegas, es decir que beneficia a todos directa e indirectamente”, comentó Horacio Ripalta, gerente de la Cámara de Bodegueros.

Agregó que poco a poco se irá movilizando el sector y se espera que aparezcan nuevos fraccionadores, ya sea con maquinaria propia o con máquinas móviles alquiladas. "Creemos que en 6 o 7 meses se verán los beneficios”, aseguró.

La ley

En el artículo 3°, pone en vigencia y da por aprobados los certificados de crédito fiscal entregados con la antigua ley, otorgados desde diciembre de 2010 a diciembre de 2015.

Luego señala que la entrega de un certificado de crédito fiscal emitido por la Dirección de Asuntos Vitivinícolas, a partir de enero de 2016, tendrá una equivalencia de $ 1 por litro de vino elaborado y fraccionado en origen, para las bodegas que fraccionen hasta 100.000 litros anuales; $ 0,50 por litro de vino elaborado y fraccionado en origen, para las bodegas que fraccionen de 100.001 litros hasta 1.000.000 de litros anuales. Hasta $ 0,20 por litro de vino elaborado y fraccionado en origen, para las bodegas de fraccionen de 1.000.001 litros hasta 5.000.000 litros anuales; $ 0,10 por litro de vino elaborado y fraccionado en origen, para las bodegas que fraccionen de 5.000.001 litros hasta 10.000.000 litros anuales; y hasta $ 0,02 por litro de vino elaborado y fraccionado en origen, para las bodegas que fraccionen más de 10.000.000 litros anuales.

Entre los objetivos de la ley se destacan: a) promover la integración vertical de la vitivinicultura; b) mantener, consolidar y expandir las empresas instaladas, y promover la radicación de empresas que fraccionen el vino de San Juan en origen; c) fomentar el aprovechamiento racional de los recursos e insumos locales; d) promover la regionalización de los vinos; e) incrementar el nivel de ocupación de mano de obra en la Provincia; f) apoyar a los medianos y pequeños productores, como bodegas boutique, elaboradores artesanales y vinos de autor; g) estimular la competitividad y acceso a la industrialización para fortalecer la cadena de valor vitivinícola en base al aumento de vino fraccionado en toda la provincia; entre otros.