El presidente del Partido Justicialista bonaerense, Fernando Espinoza, ya enfocó en la interna que se viene el próximo 17 de diciembre en la que disputará la conducción contra el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez. Sin más instancia de acuerdo, ahora se ocupa de recibir todos los avales necesarios para que no haya fallas en su lista provincial. 

Tras el último intento de unidad que no prosperó este martes, Espinoza empezó a recibir los avales a su candidatura. A la par Ménendez sigue apoyado en los intendentes del conurbano y el triunvirio de la CGT que le aporta -de costado- la cuota massista a su postulación. 

El martes, tras una larga reunión entre los intendentes Fernando Gray (Esteban Etchevarría), Jorge Ferraresi (Avellaneda), Verónica Magario (La Matanza), Espinoza, Menéndez y el diputado nacional y titular del PJ nacional, José Luis Gioja, la discusión se encaminó sola hacia la interna, que ya es una realidad. 

Este miércoles al no haber puentes y con diálogo en stand by entre ambos sectores, y el ex intendente de La Matanza empezó a recibir avales a su candidatura. 

Además de La Matanza, Espinoza apuesta a tener a los jefes comunales del interior que el día de la sesión en la Legislatura bonaerense en la que se votó el Presupuesto provincial, el Régimen Provincial de Responsabilidad Fiscal y la Ley Impositiva Fiscal 2018 bajaron a La Plata y mostraron su descontento por la sanción de las leyes. 

Como explicó Letra P, puntualmente fueron tres los acuerdos que no se cerraron. Según el espacio de Espinoza, el matancero ofreció que la mitad de los representantes de las ramas gremial y de juventud sea para cada parte. Pero el más relevante era el que proponía un año la presidencia del Consejo para Menéndez y que en el 2019 ese lugar sea para Magario. No prosperó

Menéndez y su sector ofrecieron a cambio la secretaría general del partido para  Magario. Ninguno de los dos grupos se puso de acuerdo y la reunión finalizó con una sola precisión: hasta el momento todo se encamina a una interna.