Duro mensaje del presidente: “Italia no está a la deriva”

Duro mensaje del presidente: “Italia no está a la deriva”
Giorgio Napolitano buscó tranquilizar a sus socios europeos, en alerta por la falta de acuerdo para formar gobierno tras las elecciones italianas. Afirmó que todavía está al frente el premier Monti.
En medio de la preocupación general que mostraron sus socios de la Eurozona, el presidente de Italia, Giorgio Napolitano, utilizó ayer una enérgica declaración para salir al cruce de las críticas y los temores sobre la grave situación que enfrenta el país por la falta de acuerdo para formar gobierno. “ Italia no está a la deriva. No está sin gobierno. Su gobierno se llama (Mario) Monti, sigue en funciones, y representará a Italia en el próximo consejo europeo a mediados de marzo”, sostuvo.

El jefe de Estado aprovechó una visita a Alemania para subrayar que el país saldrá adelante y que no existe la posibilidad de un “contagio” en los mercados financieros europeos, como temen los analistas. “ No habrá contagio, dijo, porque para contagiarse es necesario enfermarse y nosotros no tenemos ninguna enfermedad”.

Napolitano, que en mayo concluye sus siete años de mandato, es muy respetado en toda Europa y ahora –a raíz de su rol institucional– está en el medio de la tormenta política italiana.

Las elecciones generales del domingo y lunes pasado dejaron un panorama de incertidumbre porque ningún partido sacó la mayoría necesaria para formar gobierno por su cuenta. Al que le corresponde esa misión es al Partido Democrático (PD) de Pier Luigi Bersani, que ganó con apenas décimas por encima de la centroderecha de Silvio Berlusconi. El tercero fue el movimiento de protesta Cinco Estrellas (M5E) del cómico Beppe Grillo, quien se convirtió en un actor de peso en esta contienda.

Para conformar gobierno la centroizquierda de Bersani debe acordar con alguno de los dos que le siguen. Es sumamente difícil que lo haga con Berlusconi debido a las marcadas diferencias ideológicas que los separan. Con Grillo hay afinidad política, pero el humorista ya dijo que no dará su voto de confianza al PD porque lo considera un partido conservador que apoyó los ajustes de Monti. Esto generó una turbulencia política muy fuerte porque si no avanzan las negociaciones se deberá convocar a nuevas elecciones.

Esta incertidumbre política se puede extender por dos o tres semanas más ya que el Parlamento comienza a sesionar el 15 de marzo, y recién a partir del 20 se dará la ronda de negociaciones entre los partidos. El estancamiento en las negociaciones para formar gobierno en Italia, uno de los países más golpeados por la crisis económica europea, despertó el temor de que repercuta con fuerza en los mercados financieros.

La preocupación sobre la inestabilidad de Italia hizo que el Eurogrupo, cónclave de ministros de finanzas de los 17 países de la moneda comunitaria, incluyeran el tema en la agenda de su reunión del próximo lunes en Bruselas. “La cuestión no constaba en el orden del día, pero fue agregada”, dijo una fuente diplomática.

Napolitano trató de calmar a sus socios. “Estoy seguro de que en las próximas semanas se formará un gobierno italiano”, dijo el presidente tras ser recibido en Berlín por su homólogo alemán, Joachim Gauck. “ No hay una Italia que haya perdido la brújula. Por eso no hay peligro de contagio, no estamos enfermos”, insistió.

El jefe de Estado italiano fue recibido por la canciller Angela Merkel, quien le transmitió su “confianza en el sentido de responsabilidad de las fuerzas políticas italianas en la compleja situación actual”.

La visita de Napolitano a Alemania también tuvo sus sobresaltos, sobretodo por la visión que tienen los europeos de Berlusconi y Grillo, líderes de dos de los tres mayores partidos de la Península. El socialdemócrata alemán Peer Steinbrueck fue muy duro con ambos dirigentes, a los que llamó “payasos”. El siempre mesurado presidente italiano, de 87 años, reaccionó con indignación. “Nosotros respetamos a Alemania y exigimos igual respeto ”, estalló. “Cada uno puede pensar lo que quiera, pero hay que ser muy cuidadoso al elegir las palabras”, remarcó. Y canceló el encuentro que tenía previsto con el alemán. Grillo lo elogió por adoptar esa actitud. “ Ha demostrado ser un hombre firme. Chapeau, Napolitano”, afirmó en un texto difundido por su movimiento.

Pero la polémica parece que va a continuar. En la edición que sale hoy a la calle, la influyente revista británica The Economist define a Berlusconi y Grillo de la misma manera que lo hizo Steinbrueck: como dos “payasos”. “ Que entren los clown ”, destaca la publicación, advirtiendo que “las desastrosas elecciones de Italia son una amenaza para el futuro del euro”.

Comentá la nota