Dilma denuncia un golpe para dar paso a un "gobierno usurpador"

Dilma denuncia un golpe para dar paso a un

En su defensa en el Senado, sostuvo que "es juzgada por delitos que no cometió”. Y reafirmó su voluntad de convocar a las urnas. "El voto directo y libre es la mejor arma para conservar la democracia".

 

 

Con un gesto de inocultable incomodidad, al llegar a ese Congreso que la ungió como presidenta brasileña el 1º de enero de 2015, Dilma Rousseff pronunció esta mañana su discurso de defensa en eljuicio político en su contra, en el que destacó su "honestidad" y los valores como la "democracia".

"Pido que hagan justicia a una presidente honesta", que "voten contra el impeachment, voten a favor de la democracia", expresó la mandataria.

Rousseff, que llegó al recinto a las 9 de la mañana, indicó que ella paga el precio de nunca haber aceptado la corrupción ni defender a los corruptos de las investigaciones.  “Este impeachment fue abierto por un chantaje explícito del diputado Eduardo Cunha”, el ex titular de la Cámara de Diputados, apartado de ese cargo por sospechas de corrupción. El pretendía, dijo, que “mi partido votará a su favor en la comisión de ética y me negué”.

La jefa de Estado sostuvo: “Todos saben que no me enriquecí ni desvié dinero público. Seré juzgada por delitos que no cometí”. Entre tanto, afirmó, el ex presidente de Diputados continúa sin ser juzgado. “Esa no es una ironía de la historia. Es que se viola la democracia y se pune al honesto. Estamos a un paso de la consumación de un verdadero golpe de Estado” para dar lugar a un "gobierno usurpador".

“¿Cuáles fueron los atentados a la Constitución que cometí?” se interrogó. “La edición de 3 decretos suplementarios sin autorización del Congreso. Quedó claro que sí respetamos la ley presupuestaria y la Constitución. Todas esas previsiones legales fueron respetadas en la edición de los tres decretos”.

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, tras pronunciar ante el plenario su defensa en el juicio político que se lleva adelante en su contra./ dpa

Dilma subrayó: “Entre mis defectos, no está la deslealtad ni la cobardía. No traiciono mis principios. En la dictadura recibí las marcas de la tortura. Vi compañeros y compañeras violentados y muertos. Era joven y tenía miedo que las marcas de la tortura quedaran en mi cuerpo y en mi alma. Pero resistí y continué luchando por la democracia. Dediqué muchos años de mi vida por una sociedad libre de prejuicios y discriminaciones, por un Brasil soberano, más igual y más justo.Próxima a los 70 años de edad, no va a ser ahora que abdique de mis principios”. Añadió, también, que “honré los compromisos de mi país. Fui intransigente en la defensa de la honestidad .

"Por eso no puedo dejar de sentir en la boca el gusto amargo”.

Dilma manifestó que llega "a la última etapa de este proceso con decisión de convocar a las urnas. El voto directo y libre es la mejor arma para conservar la democracia".

Y terminó con estas palabras: “Voten por la democracia"

La presidenta suspendida llegó esta mañana al Senado brasileño para hacer una histórica declaración de defensa en el juicio político por supuestos delitos contables en el presupuesto de 2015, que puede definir mañana su destitución del cargo, al que llegó tras haber sido reelecta en 2014.

La presidenta enfrenta ahora su última batalla, en una sucesión de crisis que arrastra desde que inició su segundo mandato, el 1º de enero de 2015.

El titular de la Corte Suprema, Ricardo Lewandowski, dijo que: “la Presidenta Rousseff está defendiendo su mandato y su honra personal. Por eso, hay que darle todo el tiempo que precise para esa defensa".

Ayer domingo no hubo deliberaciones en el Senado. Pero tampoco hubo descanso. Se reunieron por un lado, los aliados de la presidenta brasileña, y por el otro sus opositores. Cada grupo trazó una estrategia para las preguntas y para las respuestas. En el entorno de Dilma afirman que ella “está preparada para responder. No irá a atacar a los parlamentarios, pero tampoco permitirá provocaciones”.

La lista de los senadores que deben hablar en el plenario empezó a componerse el sábado por la noche. La presidenta tuvo acceso a los primeros legisladores registrados. De ellos, como también de buena parte de sus adversarios, tiene la historia política que se encargó de investigar. 

Dilma fue acompañada por partidarios famosos, sobre todo del mundo como Chico Buarque. Y sobre todo el ex presidente Lula da Silva. 

Además, artistas e intelectuales brasileños firmaron una carta contra el impeachment. La firman, entre otros, el cantante Caetano Veloso, la actriz Camila Pitanga, el poeta y cantor Chico Buarque y el cineasta Luis Carlos Barreto.

En la nota, los firmantes piden al Senado que “respete los resultados de las elecciones de 2014” que consagraron la reelección de Dilma. Y afirman que el “mundo asiste con preocupación a esta amenaza a la democracia” y advierten que “este ataque a los procesos democráticos ponen en duda la supervivencia de los derechos humanos, lo que llevará a Brasil a una situación de mayor inestabilidad política, y desigualdad social y económica”.

Comentá la nota