Cristina Kirchner y Sergio Massa prorrogaron hasta fin de año la resolución conjunta que congela los salarios de legisladores y autoridades del Congreso, por considerar que la "crisis económica generada por la pandemia", no permite revisar esos ingresos.

La medida fue tomada el 27 de diciembre, cuando el coronavirus no estaba en agenda pero las flamantes autoridades consideraron que la presión social no permitía retocar los haberes, que están indexados a los  aumentos de los empleados legislativos. Cobran un 20% más. 

El año pasado hubo tres subas de 10% y restaba una final para enero, que se suspendería al menos hasta junio. La pandemia complicó el cierre de paritarias, aunque recibieron incrementos por decreto y un plus a los empleados que asisten pese al riesgo de contagio. 

Los legisladores perciben aproximadamente 170 mil pesos, sumados los viáticos por desarraigo (14,21% de la dieta) y movilidad; y con el descuento por el impuesto a las ganancias que los jueces recién empezaron a pagar hace dos años. Así seguirá hasta 2021. Por lo menos. 

El decreto reafirma que "visto que la emergencia pública que dio lugar al dictado de la norma en cuestión se vio agravada por la pandemia mencionada, resulta necesario que los representantes del pueblo compartan el esfuerzo que efectúa la sociedad en su conjunto".