Comienza la ronda de consultas para formar gobierno en Italia

Comienza la ronda de consultas para formar gobierno en Italia
El presidente Napolitano recibirá a los líderes de los partidos con representación parlamentaria. Bersani está dispuesto a asumir la responsabilidad, pero Beppe Grillo, líder del movimiento antipolítica, no le dará el visto bueno necesario.

Dolores Álvarez

Después de la elección de las autoridades de las cámaras de Diputados y Senadores, el presidente de la República italiano, Giorgio Napolitano, llamará hoy a los líderes de los grupos representados en el Parlamento y dará, a uno de ellos, la difícil tarea de formar un gobierno. Las consultas del jefe de Estado son normales tras unas elecciones o una crisis de gobierno, pero esta vez su importancia es vital ya que los resultados que salieron de las urnas el 24 y 25 de febrero pasado harán muy difícil que un Ejecutivo reciba la investidura en el cuerpo legislativo.

La coalición de centroizquierda que lidera Pierluigi Bersani consiguió la victoria en Diputados y gracias a esto obtuvo un premio de escaños que le permiten tener la mayoría absoluta, pero en el Senado, ningún partido cuenta con ella.

A pesar de que Beppe Grillo, líder del Movimiento 5 Estrellas, el partido más votado en el país sin ir en una alianza, insiste y repite que jamás le dará la confianza a un gobierno formado por los viejos políticos, Bersani confirmó que presentará "un programa de gobierno de ocho puntos" y que está dispuesto a asumir la responsabilidad que le dieron las urnas, que decretaron una victoria mínima, pero victoria al fin, de la alianza del Partido Democrático con la agrupación del verde Nichi Vendola.

Las consultas durarían dos días. Napolitano escuchará a todos los líderes políticos y después tendrá que decidir qué hacer, que será seguramente encargar a Bersani formar gobierno. El socialista hará después sus consultas personales para ver si tiene la mayoría para presentarse ante el Parlamento e informará a Napolitano. "No será tan fácil como en el Vaticano (en referencia a la elección del Papa Francisco)", admitió ayer el mandatario. Napolitano se encuentra al final de su mandato, que termina en abril, por lo que la ley le impide disolver las Cámaras en los últimos seis meses de su cargo, así que si Bersani fracasa entre las soluciones se encuentra la de un nuevo Ejecutivo tecnócrata en espera a que el próximo jefe de Estado tome la decisión de convocar elecciones.

Este viernes, la elección del presidente de Senado generó un pequeño terremoto dentro del M5E. En una reunión al rojo vivo y ante la disyuntiva de tener que elegir entre Piero Grasso, ex jefe de la dirección antimafia y miembro del PD, y el derechista Renato Schifani, actual presidente de la Cámara Alta y con presuntas relaciones con la mafia siciliana, el partido liderado por el cómico genovés decidió votar en blanco, pero algunos de sus legisladores desoyeron la orden y votaron por el fiscal, considerado un baluarte de la lucha contra la mafia.

Grillo dijo que la escena del viernes fue montada a propósito para dividir a su grupo ya que era obvio que muchos de los dirigentes del M5E, sobre todo los sicilianos, intentarían impedir el ascenso de Schifani. "La elección entre Schifani y Grasso era una elección imposible: se trataba de decidir entre la peste bubónica y un fuerte resfrío", escribió el actor en su blog. Aún es poco claro el destino de los parlamentarios que no siguieron las férreas reglas del M5E: la dirección del partido aseguró que todavía debe decidir si echará de la agrupación a los "disidentes". «

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