El 16 de junio de 2016, el Ayuntamiento aprobó el impuesto a las bebidas de Filadelfia propuesto por el alcalde Kenney. El impuesto de 1.5 centavos por onza aplica a bebidas azucaradas embotelladas o las que salen de dispensadores de gaseosas. Esto incluye gaseosas con azúcar, las de dieta, bebidas energéticas y tés helados. La votación final fue de 13 a favor y 4 en contra.

Los consumidores han pagado 2.16 dólares adicionales por un paquete de doce gaseosas desde entonces.

Kenney promocionó el impuesto como un medio para generar $91 millones al año para renovar parques, centros recreativos y bibliotecas, y además expandir los programas pre-kindergarten. En aquel entonces el Philadelphia Inquirer reportó que aproximadamente un 20% de los fondos generados —unos 81.4 millones de dólares a lo largo de 5 años— se distribuirán a otros programas de gastos, entre ellos prestaciones para empleados.

La medida tuvo su origen en fortalecer la salud fiscal de la ciudad, sin embargo, algunos expertos sostuvieron que el impuesto también podría brindar beneficios para la salud pública. En comparación con otras ciudades estadounidenses grandes, Filadelfia tiene índices más altos de los promedios de enfermedades crónicas, entre ellas hipertensión, enfermedad cardiovascular, diabetes y obesidad.

Qué se ha hecho

Durante los últimos cinco años, la ciudad ha reinvertido millones de dólares en ingresos directamente en las comunidades de Filadelfia, enfocándose en tres programas de transformación:

Desde que comenzó en 2017, PHLpreK ha crecido de atender hasta 2,000 niños anualmente a 3,300. El próximo año escolar, el programa se ampliará a 4.000 asientos, duplicando su tamaño original.

Más de 10,000 niños han participado en PHLpreK. Desde el inicio del programa, la mayoría de los niños atendidos por PHLpreK provienen de hogares que generan menos de $ 60,000 por año.

A través de múltiples encuestas anuales, más del 90 por ciento de los cuidadores informaron que sus hijos están mejor preparados para el jardín de infantes gracias a PHLpreK.

Casi un tercio de los cuidadores informaron haber regresado al trabajo como resultado de inscribir a su hijo en PHLpreK. Un tercio adicional de los cuidadores informó que podía trabajar más horas, y casi uno de cada 10 informó que podía continuar su educación.

137 proveedores de prekínder ahora reciben fondos de PHLpreK. El 96 por ciento de esos proveedores tienen las calificaciones de calidad más altas del estado.

Casi 3 de cada 5 (58 por ciento) proveedores de PHLpreK eran organizaciones propiedad de minorías o mujeres durante el año escolar 2020-21.

Los maestros y asistentes de enseñanza se emplean en 243 aulas respaldadas por PHLpreK. Cada año, más de 100 educadores de PHLpreK participan en educación continua y desarrollo profesional.

Actualmente hay 17 escuelas comunitarias designadas por la ciudad, casi el doble que la primera cohorte de nueve escuelas establecidas en 2016.

Las escuelas comunitarias atienden actualmente a más de 9,400 estudiantes, así como a familias y miembros de la comunidad.

Este año escolar, casi 600 estudiantes recibieron apoyo financiado por la ciudad para mejorar la asistencia regular a las escuelas comunitarias.

Las escuelas comunitarias han ampliado la disponibilidad de programación de tiempo extraescolar de calidad durante los últimos tres años. Durante el año escolar 2020-21, hubo casi 1,500 oportunidades de tiempo fuera de la escuela para estudiantes en escuelas comunitarias.

Más de 500 estudiantes adultos se inscribieron en oportunidades de educación para adultos en las escuelas comunitarias antes de la pandemia de COVID-19. Esta asociación se ha duplicado desde su lanzamiento en el año escolar 2017-18 con 213 estudiantes adultos.

Durante el año escolar 2020-21, la Ciudad invirtió casi $ 460,000 para apoyar la contratación de 17 administradores de casos de asistencia y para proporcionar incentivos de asistencia para involucrar a los estudiantes y aumentar la asistencia en todas las escuelas.

Durante el año escolar 2020-21, casi 4,500 estudiantes y familias han sido atendidos a través de eventos de escuelas comunitarias y distribución de recursos.

Los esfuerzos de reconstrucción están activos en 68 sitios en toda la ciudad. Más de $ 200 millones están comprometidos, o ya se han gastado, para completar el trabajo en los sitios de reconstrucción.

74 aprendices han sido aceptados en el programa de desarrollo de la fuerza laboral de Rebuild.

116 empresas están inscritas en el programa de apoyo empresarial de Rebuild para hacer crecer y fortalecer su negocio, preparándolos para las oportunidades de contratación de Rebuild.

El 64,4 por ciento de los dólares de los contratos de Rebuild comprometidos con Rebuild se han adjudicado a diversas empresas: el 43,9 por ciento a empresas comerciales minoritarias y el 20,6 por ciento a empresas comerciales de mujeres.