La infraestructura civil y el sistema sanitario quedaron destruidos por la guerra en gran parte del país, haciendo imposible tratar otras enfermedades como la fiebre del dengue o la malaria.

Las partes enfrentadas en la contienda deben facilitar la importación de medicina y alimentos, pidió. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en los últimos tres meses unas 362.000 personas enfermaron de cólera en el país de la península arábiga, y desde el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) se teme que uno de cada 45 yemeníes padezca de cólera para fines de este año.

Maurer, quien llegó este domingo a Yemen, en una visita que se extenderá durante cinco días, aseguró que el país más pobre del mundo árabe vive "un brote de cólera sin precedentes que afecta a un preocupante, y creciente, porcentaje de la población". "Este sufrimiento innecesario es indignante. El mundo se dirige sonámbulo a una tragedia aún mayor", insistió el presidente de CICR.

Unas 1.828 personas murieron desde el comienzo del conflicto que enfrenta el Gobierno apoyado por una coalición de países sunitas liderados por Arabia Saudita y los rebeldes chiítas hutíes, que reciben ayuda de Irán.