Aseguran que el cierre del Parque Centenario favorece a concesiones privadas

Aseguran que el cierre del Parque Centenario favorece a concesiones privadas
El abogado urbanista, Jonatan Baldiviezo, afirmó que "el vallado del Parque Centenario persigue el interés económico de liberar el espacio verde y público para que las concesiones privadas sean viables en el futuro".

“El accionar que tiene la Ciudad no es una sorpresa porque desde que Mauricio Macri asumió el gobierno el único criterio con el cual observa los parques y las plazas es el rédito económico, desconociendo las funciones ambientales y democráticas que tienen para la comunidad”, dijo Baldiviezo a Télam.

Para el abogado urbanista, integrante de la asamblea de vecinos y del Colectivo por la Igualdad, detrás de acciones como el vallado del Parque Centenario “está el interés económico de liberar el espacio verde y el espacio público para que, en el futuro, las construcciones y las concesiones sean viables”.

Así, “las distintas actividades que ha tenido el macrismo contra el espacio público han perseguido el rédito económico, por eso ha sancionado destinar espacios verdes a construcciones y concesiones para empresas”, sostuvo el profesional de la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas.

Desde que “el año pasado se comenzó a discutir en la Legislatura un proyecto para autorizar las concesiones de confiterías y restaurantes en las plazas y parques, comenzaron una serie de desalojos en áreas ocupadas por habitantes, vendedores ambulantes y feriantes, como fue el desalojo en Constitución”, refirió.

Además, “desconociendo la función ambiental de parques y plazas, el macrismo estimuló que hayan estacionamientos subterráneos, que quitan al suelo la función de receptores de agua” para evitar anegamientos por lluvias, observó el abogado.

“Vemos la desidia en materia de concesiones y a empresas que están ocupando el espacio público actualmente, muchas pagando cánones irrisorios o ningún canon porque ocupan ilegalmente, como el estacionamiento del Hipódromo de Palermo”, ejemplificó.

Según Baldiviezo, “no pagan ningún canon porque ocupan ilegalmente y debía ser desalojado, y la misma intensidad que ejerce el gobierno macrista para reprimir a los habitantes que están haciendo un uso comunitario del espacio verde, no la direcciona contra las empresas”.

“Esta acción represiva y autoritaria del gobierno macrista va produciendo una reacción de organización entre los habitantes de la ciudad, que se van uniendo en distintas asambleas y van creando un espacio para oponerse a un modelo de ciudad para ricos, e imponer un nuevo paradigma del derecho a la Ciudad”, opinó.

Baldiviezo integra la asamblea de vecinos que debatía anoche medidas de lucha contra el enrejamiento perimetral del Parque Centenario, que generó refriegas con la policía metropolitana.

Mientras la fuerza de seguridad mantenía una guardia con personal de Infantería y de calle en la zona -que amaneció vallada el lunes-, vecinos de los barrios de Almagro, Caballito y Villa Crespo deliberaban en la Avenida Díaz Vélez al 5000.

El tenor de las exposiciones de los oradores apuntó a impedir el inicio de la puesta de la reja, para evitar lo que consideran la privatización ilegal de este espacio público, para el que piden mejoras, como más bebederos.

“Las mejoras del Parque, como bebederos y sistemas de riego, se pueden hacer tranquilamente sin las rejas, y el argumento de la seguridad es una maniobra para tener una excusa para apuntar a la privatización del espacio público”, dijo a Télam José Fernández, vocero de los feriantes del Parque Centenario.

En los últimos meses, los feriantes juntaron unas 12.000 firmas contra la cerca que perjudicaría también a la feria que suma unos 1.200 puestos rotativos los sábados y domingos, “de los cuales hoy van a quedar cerca de 700 afectados”, además de la Feria de los Artesanos que funciona dentro del predio, informó.

“La gente no quiere la reja porque la solución que manifiesta el gobierno que va a producir la reja, es una mentira para los que vienen a hacer deporte, los que vienen a pasear, la gente de la tercera edad y la gente que menos tiene: lo que sí va a solucionar es el bolsillo de algunos”, sentenció Fernández.

En el perímetro ya vallado del parque, a la altura del mástil, se mantienen apostados unos 50 efectivos de Infantería y otros policías de calle de la Metropolitana.

En tanto, quienes habitualmente realizan prácticas deportivas en el parque, transitan día y noche por las veredas externas, ya que están cerrados todos los ingresos con vallas de aluminio de unos tres metros, dejando cerrados, en plenas vacaciones escolares, los juegos de plaza, las canchitas de fútbol y las estaciones deportivas para hacer ejercicios.

Comentá la nota