Allí se le consultó si el Gobierno Nacional hizo lo que ellos tenían previsto, y consideró: "Un poco en línea con lo que dijo Llamil Abdala, creo que este es un primer paso. Hay una parte macroeconómica, pero creo como economista que son pasos tendientes a cierta normalización de la economía en un contexto de mucha turbulencia, pero sin anuncios fuertes en la materia dólar, que es lo que genera mas incertidumbre a cortísimo plazo.

Pero se dieron dos anuncios importantes: la desgravación de los activos personales y otros títulos de empresas, para que la gente pueda elegir otros instrumentos de ahorro diferentes al dólar. Y en lo específico de lo industrial, fue el tema de la eliminación de los derechos de exportación a los industriales, es decir, lo que se conoce como retenciones. Tuvimos nuestro pico histórico de retenciones en 2011, estuvimos en un sendero decreciente desde ese año. Estas medidas tienden a recuperar un poco ese terreno perdido".

Cuando se le preguntó si los anuncios de Guzmán permiten ver una Argentina con un poco mas de esperanza, expresó: "Son medidas que de alguna manera levantan un poco la vista del día a día, pero es muy importante generar señales de certidumbre y calma en lo inmediato, que es lo que genera 'ruido'. Los consumidores, ante el miedo, tendemos a gastar menos plata y guardarla. Las medidas deben tender a generar calma".

Se le pidió entonces su opinión sobre qué le faltaron a los anuncios, y dijo: "En mi opinión, lo más importante, que lo anunció el ministro Kulfas, es una serie de medidas importantes, de tasas blandas para la industria, lo que permitiría retomar la inversión en los sectores que están recuperándose y empezando a producir, y continuar a los que nunca dejaron de hacerlo. Ese sería un punto clave, fortalecer el crédito productivo. En marzo era difícil prever la profundidad del impacto de la pandemia, y creo que la diferencia con este momento es que, de alguna manera, parecemos haber tocado el fondo y estamos en el sendero de la recuperación. Si bien ya tenemos tres meses —de abril para aquí— de crecimiento, el pico fue tan duro que todavía estamos debajo de los niveles de febrero, por lo tanto nos falta".

Por último se le preguntó qué esperan de 2021: "Un 2021 donde el Covid nos siga acompañando, con todo lo que ello implica, donde progresivamente se tienda a esa nueva normalidad, y recién iría retomando un nivel similar a 2019 en la segunda mitad del año, en términos de producción. Habrá que ver qué pasa con nuestros socios comerciales, y ver qué pasa con el precio de la soja. Si la normalización continúa, podría ser un año que trimestre a trimestre vaya cada vez mejor. Para la industria, la pandemia es un golpe muy duro que se agrega a 4 años muy malos. La pandemia fue llovido sobre mojado".