PJ platense: la Guerra o la Paz

PJ platense: la Guerra o la Paz
La realidad del Partido Justicialista de la capital bonaerense puede convertirse en una bomba de tiempo. El papel del actual intendente, Pablo Bruera, influye en el accionar de actores históricos y de los nuevos, que comienzan a surgir en el avance de la estructura partidaria que busca definir su futuro. El rol de Julio Alak parece definir el armado en contra del mandatario.
La realidad de Pablo Bruera marca un momento de inflexión en su desgastada vida política, que por múltiples causas, lo aislaron de los espacios de poder con peso específico en la capital de los bonaerenses. El surgimiento de fuerzas antagónicas a su línea, y la tragedia del 2 de abril, además de la pérdida masiva de apoyo ciudadano en las elecciones, lo dejó en jaque dentro de las negociaciones más tradicionales.

Como si fuera poco, la elección de medio término se convirtió en un cachetazo a las pretensiones de subsistencia en un panorama notablemente adverso, y que lo hunde cada día más. Pero el panorama dentro de la estructura del partido que fundó Juan Domingo Perón puede ser aún más hostil.

Años atrás, gracias al apoyo de Raúl Pérez y Juan José Amondarain, el jefe comunal de la 8ª logró hacerse cargo del PJ platense. Pero el pase al massismo de sus ex aliados -que le brindaron la espalda suficiente para ser la cabeza del PJ- provocó el descenso de sus defensas a niveles nocivos allanando el campo a otros actores con las pretensiones de desbancarlo.

Y las razones para hacerlo no faltan. Debilitado, sólo con la ayuda del MUP (espacio del camaleónico Esteban Concia) y los que responden a su jefe de gabinete, Santiago Martorelli, el mandatario ruega que otros actores no decidan unirse para “bajarlo”.

Uno de los referentes que decidieron disputar con fuerza el sillón de calle 54, esa sede que supo formar parte de la época joven que modificó el estilo del partido en la localidad, es el actual ministro de Justicia nacional, el ex intendente Julio Alak.

“El Turco” impulsa una reestructuración de la doctrina partidaria para volver al tiempo en que las nuevas figuras promovían avances y perspectivas de vanguardia dentro de una estructura más ortodoxa. Así, con esa impronta, se logró construir una moderna sede en las cercanías de la Casa de Gobierno. En la danza de nombres, de esos “notables” que induce el funcionario kirchnerista, figuran Gonzalo Chávez, hijo de Horacio Irineo Chávez (quien fuera dirigente del partido y terminara asesinado por la Triple A), junto a Vicente “Pestaña” González, hombre ligado al gremio de los trabajadores universitarios, ATULP.

Por su parte, Camilo Vidal, un hombre ligado a Carlos Bonicatto, el defensor del pueblo bonaerense, tiene serias pretensiones de manejar los hilos del partido. También figura Sergio Fernández, de la agrupación 28 de junio, quien forma parte de las filas del intendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino y en la patriada del massista de la 1ª, buscaría imponer su estilo en La Plata.

Una de las incógnitas, ante la certeza de que la unión anti Bruera sería un hecho si decide presentarse, es que hará La Cámpora en el apoyo a los referentes que se postulen. Florencia Saintout, la decana de Periodismo recientemente electa concejal, quien tuvo un fuerte apoyo de Alak en la elección, y Martín Alaniz, el referente de ese espacio, tiene un notable acuerdo en el Concejo Deliberante junto al edil alakista Sebastián Tangorra.

Apertura al debate

Por los círculos más importantes del justicialismo en la capital provincial los ánimos contra Bruera están caldeados por el constante destrato que les dio y el nulo debate que siempre se pregonó de diferentes fuerzas. Así, con ese panorama, los opositores platenses auguran un “contundente fracaso” si la línea de trabajo no cambia.

Sin atenuantes, algunos se animan a decir que todo el PJ irá “salvajemente” contra los hermanos Bruera (y sus aliados), panorama que deja un denominador común: aislamiento ante cualquier llamado para salvar su proyecto, hoy en decadencia.

El caso del senador provincial Emilio “Taka” López Muntaner, quien busca decidido meterse en la discusión para calmar las aguas, genera rechazos múltiples por mantener lazos con diferentes espacios y apenas mantiene la ligazón con el palacio de calle 12.

Cuestionado por no apoyar la campaña, y por haber criticado una de las máximas insignias nacionales como YPF, cuando advirtió la supuesta existencia de compuertas en la petroquímica de la empresa con mayoría de acciones estatales que “ayudaron” a la inundación en La Plata, queda afuera de los selectos por el oficialismo.

Renovación de Consejeros

Otro de los temas a resolver es la situación de los consejeros provinciales, cargos que manejan Alberto Pérez; el mismo Pablo Bruera; Juan José Amondarain, en las filas del Frente Renovador y Carlos Castagnetto, hoy candidato a presidente del Club Gimnasia y Esgrima, una de las instituciones más importantes de la ciudad, además de mantener representación a través de su esposa e hijo en la política tradicional.

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