La provincia de Buenos Aires ya logró aumentar unos tres puntos su porción en la coparticipación federal en las primeras semanas del año por el efecto que tuvo el Pacto Fiscal en el esquema de reparto de fondos. Mientras hasta fin de 2017 la provincia gobernada por María Eugenia Vidal recibía cerca del 18 por ciento del dinero total girando a las gobernaciones, esa porción se elevó hasta el 21 por ciento. Los cálculos iniciales que habían hecho funcionarios bonaerenses indicaban que tras la firma del consenso fiscal la provincia recuperaría unos cinco puntos de participación en el reparto general.

De acuerdo a los datos diarios difundidos por la Comisión Federal de Impuestos, en las tres primeras semanas del 2018 la provincia de Buenos Aires recibió el 21,6% de los recursos girados a las provincias (con excepción de la Ciudad de Buenos Aires, que tiene una partida aparte en el reparto de coparticipación). Así, la administración bonaerense fue acreedor de 9.493 millones de pesos de un total repartido de 43.900 millones.

A fines del año pasado el subsecretario de Finanzas bonaerense Sebastián Katz había afirmado que la provincia pasaría este año de recibir unos 18 puntos de la torta general que se reparte entre provincias a 23,3%, mientras el aporte bonaerense a la recaudación nacional es de 37%. Desde la provincia afirmaron, de todas formas, aclararon que se trató de un cálculo "inicial" que no es definitivo. En los últimos quince años el porcentaje de fondos girados a Buenos Aires respecto de la torta total fue menguando casi todos los años. En 2002 la parte que recibían las arcas bonaerenses era superior al 24%. El último pico de participación bonaerense en la torta general fue 1983, cuando la cifra alcanzaba el 26,3%.

La firma del Pacto Fiscal, a mediados de noviembre del año pasado, cambió el mapa del giro de fondos a las provincias, principalmente como consecuencia de la derogación de un artículo de la ley de Impuesto a las Ganancias que conformaba el fallido Fondo del Conurbano Bonaerense, que a fin de cuentas terminó siendo un instrumento de financiamiento para el resto de las provincias más que para el objetivo que perseguía al ser creado. Buenos Aires, así, recibirá en 2018 41.000 millones de pesos por la firma del Consenso.

Esos fondos provienen de dos vías: 20.000 millones a partir de la eliminación del Fondo del Conurbano y 21.000 millones como compensación especial. De ese total, sólo la primera parte es coparticipable con los intendentes: los 135 municipios bonaerenses recibirán el 16,14% de los 20.000 millones, lo que representará un giro de 3.200 millones. La compensación especial, por su parte, está eximida de la obligación de derrame hacia los gobiernos locales.