El Gobierno confirmó el llamado a licitación para la construcción del nuevo gasoducto Vaca Muerta que permitirá duplicar el transporte de gas desde la cuenca neuquina que hoy se encuentra desbordado.

Según lo publicado en el Boletín Oficial a través de la resolución 437/2019 de la Secretaría de Gobierno de Energía, en una primera etapa el caño unirá la planta de tratamiento de Tratayén en Neuquén con la planta compresora Saturno en Salliqueló, ubicada en los alrededores de Bahía Blanca.

En esta fase inicial, el ducto permitirá evacuar unos 15 millones de m3 diarios, pero se estima que posteriormente esta capacidad se amplíe a 40 millones de m3 diarios y que el caño llegue hasta San Nicolás, uno de los nodos centrales que abastece el sistema de transporte argentino por su importante consumo industrial y sus plantas de ciclo combinado.

El radicalismo cuestionó la licitación de una obra de USD 2.000 millones para Vaca Muerta

Desde el entorno de Lopetegui celebraron que se trata del primer gasoducto que se construirá en 31 años y destacaron su importancia en término de divisas al permitir reemplazar importaciones de GNL por producción doméstica por unos USD 240 millones anuales.

En rigor, el verdadero objetivo del ducto es allanar el camino para instalar una planta en Bahía Blanca para exportar gas licuado en grandes cantidades y así solucionar la falta de dólares genuinos que hace años sufre la economía local.

Sin embargo, el proyecto ha desatado algunas críticas dentro del kirchnerismo y hasta de algunos aliados radicales como el especialista en energía Jorge Lapeña, que dirige el prestigioso Instituto Mosconi. Según el think tank energético, la iniciativa no cuenta con ningún estudio de factibilidad y hay muchas dudas respecto al método de financiamiento, que contaría con aportes del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (Anses).

Rocca presiona para quedarse con el gasoducto Neuquén-Rosario pese al procesamiento

Otra de las polémicas pasa por el régimen especial de 17 años que gozarían las empresas ganadoras de la licitación, que se sumará a una licencia de 35 años con la posibilidad de extenderla por otros 10 adicionales.

De acuerdo a lo comunicado, el 12 de septiembre se realizará la apertura de ofertas, donde seguramente disputarán los principales jugadores del sector -mediante sus distribuidoras TGS y TGN- como Pampa Energía y Tecpetrol, la petrolera de Paolo Rocca que como anticipó LPO, hace tiempo viene presionando para quedarse con esta obra.