¿A qué piso va? Tiene que anunciarse." Gabriela Vázquez es la nueva presidenta del Consejo de la Magistratura y el portero todavía no la conoce. Fue designada anteayer, con una mayoría muy ajustada, formada sólo por los votos del kirchenrismo, del que hoy se muestra distante.

"No soy kirchnerista ni opositora", dice. Pero además cuestiona al jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quien ayer por la mañana acusó de "golpistas" a los jueces que avanzan contra el Gobierno. "Me parece una barbaridad lo que dijo porque, viniendo de un funcionario de tan alta jerarquía, es una presión muy fuerte a la independencia del Poder Judicial", dice Vázquez, que tiene 32 años en la Justicia y siete como camarista laboral. Es una de las referentes de la Lista Celeste, hoy la más cercana al Gobierno en la interna de la Asociación de Magistrados, donde la semana próxima habrá elecciones.

Los otros dos jueces que integran el Consejo no la votaron. Uno de ellos es Luis María Cabral, actual presidente de la Asociación por la Lista Bordó, con quien ayer terminó casi a los gritos. Él la acusó de permitir un "avasallamiento" del Poder Judicial después de que ella convocó, tal como quería el oficialismo, a un plenario extraordinario para cambiar al administrador general del Poder Judicial. Ese cargo lo ejercía un hombre cercano a la Corte, pero ahora lo hará un militante kirchnerista, de la comisión directiva de Justicia Legítima. Vázquez dice que le da tranquilidad para iniciar una nueva etapa de "transparencia" en el manejo de los fondos de la Justicia.

-¿Cree que la Corte tiene demasiada injerencia en la administración del Poder Judicial?

- Para mí la Corte es la cabeza del Poder Judicial, la que fija las políticas públicas. El Consejo se hizo para que los jueces nos dedicásemos a hacer sentencias y el Consejo se ocupara de pintar paredes, de los edificios, toda la parte que te saca de tu trabajo jurisdiccional neto.

-¿Cree que debe cubrirse ahora la vacante que deja Zaffaroni?

-La Constitución Nacional dice que el Poder Ejecutivo es quien propone, y me parece lógico que lo haga. Es legítimo.

-¿Qué opina de la denuncia penal contra los senadores que se niegan a dar acuerdo para un eventual reemplazante?

-No soy penalista, pero me parece que tiene que ver más con algo político. Me parece una actitud antidemocrática, pero dudo que sea un delito penal.

-Capitanich dijo que hay una persecución de los jueces al Poder Ejecutivo y habló de un "golpismo". ¿Qué opina?

-Me parece una barbaridad lo que dijo, porque viniendo de un funcionario de tan alta jerarquía es una presión muy fuerte a la independencia del Poder Judicial. Me parece que es un discurso que no coincide con el respeto debido a la división de poderes y a la independencia del Poder Judicial.

-Tuvo alguna vez militancia política?

-No. Yo nací en el 63. En la adolescencia no había democracia y en el 82 entré a trabajar como meritoria y los trabajadores judiciales no pueden militar en partidos políticos. Sí mi papá. Era militante y fue concejal del partido socialista de Alicia Moreau de Justo. Era un socialista ateo. Cuando yo le dije que iba a estudiar en la Universidad Católica casi se infarta, pero después me acompañó y leyó todas las encíclicas. La Doctrina Social de la Iglesia tiene absoluta coincidencia, sobre todo en lo patrimonial, con el socialismo.

-¿Cómo es su relación con Gils Carbó?

- Yo fui 16 años fiscal del fuero del Trabajo y los fiscales no penales son muy poquitos. Hacíamos las reuniones anuales de fiscales y ahí nos conocimos. Fundamos la Asociación de Fiscales (Affun). Hay una foto que sale y sale, donde estoy con Gils Carbó. Es la única foto que tengo, del día de su jura.

-¿Qué opina de Justicia Legítima?

-Es un espacio de jueces, fiscales y defensores que tienen muchas ideas que comulgan con muchísimas de las ideas que postula Ricardo Lorenzetti. Si él no hubiese sido presidente de la Corte seguramente lo hubiesen convocado para participar. Él está a favor del pago de impuesto a las ganancias de los jueces, del ingreso democrático.

-Justicia Legítima hizo una manifestación contra la Corte.

-Estoy hablando de lo conceptual. Justicia Legítima comenzó en diciembre de 2012 en medio del conflicto por la ley de medios. A mí me invitaron a firmar esa solicitada, pero dije que no. No estoy de acuerdo en varias cosas. Y yo quiero trabajar desde adentro de la Asociación de Magistrados para democratizarla, éste es el gremio nuestro.

-Cabral dijo que al habilitar ese plenario extraordinario (donde se cambió el administrador), usted estaba permitiendo que se avasallara el Poder Judicial.

-Es una locura total. En el plenario el tema salió y yo, como presidenta, no podía dejar pasar el tiempo. Había una cuestión de urgencia planteada por el propio doctor Cabral, que me amenazó con que yo no iba a poder pagar los sueldos.

-Cabral dijo que el mes pasado los sueldos se atrasaron porque el Poder Ejecutivo demoró las partidas. ¿Qué tiene que ver con el cambio del administrador?

-Yo no le estoy reprochando nada al administrador, pero si yo empiezo una gestión como primera mujer presidenta del Consejo de la Magistratura, y ya estoy siendo amenazada públicamente con lo que decía el doctor Cabral, entonces yo quiero por una cuestión de transparencia iniciar mi gestión con la persona que sea la más adecuada..