Por @NicoCancelare

 

Martin César dialogó con SECCIÓN CIUDAD sobre la actualidad del macrismo, tanto en la Ciudad como en la Nación, y acerca de la militancia e inclusión de los jóvenes en la política. “Los jóvenes se suman por pasión a la política y saben que somos distintos”, aseguró.

 

“Tanto a nivel porteño como en nacional, fue muy bueno lo de Cambiemos. Muy pocas veces se ha dado que un oficialismo, después de dos años, aumente la cantidad de votos”, comentó el Presidente de Jóvenes PRO.

 

En esa misma línea, expresó que el PRO “siempre se ha mostrado como un espacio frentista”: “Desde 2007, en todas las elecciones vamos sumando algún partido o actor. En 2013 se incorporó Unión por la Libertad; en 2015, la UCR con Cambiemos. Siempre estamos abiertos al diálogo y al frentismo de creer que los partidos políticos solos no resuelven las cosas”, justificó.

 

Por otro lado, hizo hincapié sobre la cooperación entre el gobierno nacional y porteño: “Todavía, como país, nos falta mucho madurar porque hemos tenido que esperar que haya dos gobernantes del mismo partido para que puedan trabajar en conjunto”. “Lo bueno es que nosotros lo vamos a dejar como una política pública de Estado y lo está haciendo Mauricio Macri cuando habla con todos los gobernadores de trabajar a través del dialogo”, agregó.

 

Además, se mostró muy convencido del equipo a la hora de hablar sobre los integrantes de Jóvenes PRO: “Como juventud, nos solo trabajamos en los años electorales, sino también ponemos un énfasis enorme en los que no se vota”.

 

¿Cómo funcionará ahora el oficialismo, siendo que por primera vez tienen mayoría en la Legislatura de la Ciudad?

 

El dialogo va a estar siempre. Todas las políticas públicas que llevamos a cabo en el gobierno de la Ciudad son en consenso con los otros bloques porque sabemos que cada uno tiene su mirada y cuestión para aportar. Además, representan a parte del pueblo. Tenemos una cultura democrática muy fuerte. Es un desafío y debemos afrontarlo con humildad, por sobre todas las cosas. De hecho, cada proyecto que se realiza es con el consejo de la oposición y en conjunto con los vecinos: no hay ninguna obra en la Ciudad que no haya sido consultada con los ciudadanos. Que hoy tengamos, circunstancialmente, una mayoría en la Legislatura no nos va a hacer perder la esencia.

 

En entrevistas con SECCIÓN CIUDAD, diversos legisladores opinaban que la urbanización de villas porteñas es solo marketing.

 

No es así, el desarrollo humano hace a la igualdad de las personas. El desarrollo urbano de esta integración social es que la gente deje de vivir en calle de barro y pase a la de asfalto; que tenga agua potable y tendido eléctrico. La Villa Olímpica que se está construyendo para los Juegos Olímpicos Juveniles 2018 es un desarrollo urbano que luego pasaran a ser viviendas sociales. Las grandes obras son unos de los pilares fundamentales de la justicia social, porque es algo que queda para siempre. Transitar por lugares más seguros, iluminados, mayor vivienda: esas son las cosas que eliminan la brecha y le cambian la vida a la gente. Nosotros queremos tener una Ciudad de Buenos Aires, no que la zona sur sea postergada como lo ha sido durante muchos años y que esta gestión fue la primera en ponerle un foco en serio.

 

Desde 2007 que triunfa el PRO en la Ciudad, ¿porqué crees que no salió una oposición que pueda ganarles?

 

Los porteños siguen apostando por el dinamismo. Hace diez años estamos gobernando, sabemos que es una responsabilidad enorme y muchos signos políticos, que gobernaron durante un tiempo, no han hecho su gestión tan transformadora como esta. Nosotros tenemos, entre uno de nuestros ejes principales, la transformación: nunca perdimos las iniciativas para hacer nuevas obras y cambios. Ahora, por ejemplo, con Mauricio y Horacio Rodríguez Larreta se están haciendo cambios en materia de autonomía: muchas cosas que no pudo hacer el actual Presidente, las está haciendo ahora Larreta porque hay un trabajo en equipo y conjunto con el gobierno Nacional.

¿Qué trabajo hacen para sumar jóvenes al PRO?

 

Cada día se suman muchos jóvenes a Cambiemos. Tenemos una red de trabajo voluntario muy grande, siempre hablando de la Ciudad de Buenos Aires. Como juventud es que no solo trabajamos en los años electorales, sino también ponemos un énfasis enorme en los que no se vota, a través de las capacitaciones y acciones en el territorio. Hacer que la juventud funcione como un puente entre los vecinos y el gobierno de la Ciudad. Tenemos un esquema de trabajo permanente con actividades en las 15 comunas. Hoy en día tenemos una responsabilidad histórica de ser la juventud que pertenece al partido que gobierna la Ciudad, la Provincia y la Nación. Algo que nos ayuda mucho es la cercanía que tenemos con los funcionarios y dirigentes: tenemos un apoyo muy grande por parte de ellos. Horacio está haciendo una gestión que nos representa y estamos orgullosos de tenerlo como jefe de Gobierno.

 

¿Qué papel juegan las redes sociales a la hora de militar?

 

Las redes son muy importantes, los jóvenes que se suman tienen su primer contacto con nosotros escribiéndonos por ahí. Tambié algunos porque nos ven en las mesas con sombrillas en las esquinas de cada barrio. A todos los jóvenes que se unen a nosotros, les damos actividades de formación profesional.

 

¿Al ser un partido que está gobernando, puede ser que se sumen jóvenes a militar pero en realidad para conseguir un empleo?

 

En nuestro caso, todos los jóvenes llegan por pasión a la política y saben que somos distintos. Nuestra gran masa es de jóvenes voluntarios y está bien que así sea: que se sumen por pasión, amor a la patria y a cambiar. Tratamos de buscar la necesidad y gusto de todos los voluntarios. No es lo mismo alguien que tiene un perfil más académico que alguien que le gusta más estar en la esquina charlando con los vecinos. Un militante no tiene que ser un número más.

 

Muchas veces se criticó el concepto de "equipo" que impulsó el PRO, casi enterrando la idea del "líder único" en política. Quizás por la definición de "el mejor equipo de los últimos 50 años".

 

Antes en otros gobiernos tenías un líder indiscutible que todo lo que decía era palabra santa. Había una mesa chica con políticos arrogantes y alejados de la realidad. Nosotros proponemos un esquema totalmente contrario: con cercanía, visión de equipo y humildad. Horacio, cuando arranca cada una de las reuniones, dice tres cosas: “Primero, no vengo a hablar de política (es decir, no bajar línea partidaria) sino de gestión; segundo, pueden mencionar lo bueno, pero hablemos de lo que hace falta, y tercero, escucha más de lo que habla. Es una forma moderna la que proponemos como partido. Es una comunicación muy nueva que busca la cercanía con los vecinos y trata de ser más horizontal. No con tanta liturgia que tienen algunos partidos políticos que se han quedado en el tiempo. Los respeto, porque son parte de la política; tampoco creemos que lo que hacemos nosotros está todo bien y lo que hace el otro todo mal. Son formas distintas. Antes, la comunicación estaba vista de forma unidireccional: desde el político hacia la ciudadanía. Hoy es un ida y vuelta.