Daniel Tomas: “Queríamos estar por honor a José Luis y a los militantes”

Un emocionado dirigente llegó de manera dificultosa a cumplir con su deber cívico. “Estamos aquí porque es nuestra obligación y porque esto es muy bueno”.

La mañana en la escuela San Vicente de Paul era atípica, para el común de las elecciones. Los autos bramaban en la puerta y se alejaban despacio dejando a los electores. Pero el paisaje particular eran los periodistas que se habían volcado en el establecimiento. El motivo era la llegada del diputado nacional, candidato en primer término, Daniel Tomas que a pesar de estar convaleciente decidió ira votar y cumplir con su deber cívico. De hecho fue la primera vez que el legislador se expuso al público luego del accidente que sufriera junto a José Luis Gioja y Margarita Ferrá, esta última perdió la vida, en el luctuoso acontecimiento.

La camioneta blanca conducida por Daniel Turón, amigo del legislador y presidente de la Fundación San Juan de la Frontera, ingresó lentamente, custodiada por efectivos del Ejercito que cumplían con la misión de controlar el comicio en el establecimiento.

El vehículo fue inmediatamente rodeado de periodistas que querían saber cual era su estado. También muchos militantes estiraban sus manos para tocarlo.

Al bajar lo hizo con un andador, y lentamente avanzó entre la gente,el objetivo era llegar hasta la urna y cumplir con el deber cívico. A su paso los aplausos y gritos de “dale Daniel”, “fuerza Daniel”, daban un panorama más que emotivo para la lenta marcha.

A mitad de camino, en el semblante del legislador se notaban rasgos de cansancio. “Una silla, una silla”, gritó uno de los colaboradores. Tomas se sentó, bajó los brazos para tomar aire y una vez repuesto agradeció a todos los que lo acompañaron. “Quiero agradecerles a todos por habernos esperado,”por estar todos acá”, luego de un corto silencio se preguntó ¿por qué venimos? “ustedes ven que no estamos en plenitud de condiciones, pero queríamos estar porque vale la pena, hemos sufrido la perdida de una militante importante como Margarita, creo que por honor a José Luis, que se está recuperando, a Héctor y a los miles de Sanjuaninos que nos han hecho sentir su cariño”.

Para Tomas, el hecho del esfuerzo por ir a votar “es una obligación por todo lo que pasó y por los años que llevamos en esto. Vine con mi esposa, mis hijos, que creo que son los que me han fortalecido en estos días”.

Por su parte respecto al gobernador Gioja, que en esta ocasión no recorrió los barrios de su departamento y de la provincia con la campera roja dijo que “se recupere pronto que sigamos rezando todos por el y que su sacrificio vale la pena y seguirá valiendo la pena”, aplausos de militantes y de curiosos se hicieron sentir en el fondo de la charla.

Agregó que “yo quería estar y que todo el esfuerzo de los militantes valiera la pena y agradecerles . Esta es mi casa, yo me he criado acá”, el momento tuvo demasiado peso para el hombre que se quebró y unas lagrimas por su rostro no le permitieron continuar por un instante. De nuevo los gritos de “vamos Daniel” se sintieron y hasta algunos periodistas aplaudieron al legislador.

“Voy a cumplir con esto, luego me voy a mi casa y esperaré hasta la tarde que las cosas se vayan dando. Se que hay una convocatoria en el partido y es importante que todos los que quieran estar estén en el partido”, afirmó.

A su vez al analizar la dirigencia política afirmó que “independientemente del color político, lo que he notado en los últimos días, que muchos amigos me han apoyado en este momento”.

Cuando analiza su situación afirma que “uno está acá porque Dios es grande, si vos decís te caíste de un helicóptero, realmente es como para decir que fue un piñón muy grande”, de nuevo los gritos de aliento.

Posterior a eso, luego de la improvisada conferencia de prensa se levantó lentamente y protegido por los soldados de ejercito avanzó hasta la urna. El malón de cámaras lo siguió para conseguir este momento. Al regreso, dos abrazos que se sintieron. El primero con Juan Carlos Gioja, donde se vio la amistad entre los dos hombres y luego con Pablo García Nieto.

Otro rasgo para destacar es el llanto de algunas dirigentes que estiraban la mano para tocar a Tomas. Al llegar a la camioneta, de nuevo la prensa lo detuvo un largo rato. Hasta que la movilidad avanzó despacio entre la gente, con la labor cumplida.

Comentá la nota