El comienzo de la era Obama no trajo nada bueno: la bolsa local se derrumbó 5,75%

Pese a la recuperación del crudo, la bolsa local se desplomó arrastrada por Wall Street. Fue la peor caída desde el 1° de diciembre. En el año, el Merval ya acumula un retroceso de 3,2%
Estados Unidos estrenó presidente. Pero mientras que el mercado esperaba al menos cierto alivio bursátil, lo que ocurrió dejó con la boca abierta a más de uno. No sólo no hubo euforia, sino que todos los índices bursátiles internacionales cayeron, incluyendo los de Wall Street.

En Argentina, la cosa fue más sombría. Obama no tuvo una bienvenida criolla muy feliz. Es más, para la bolsa local fue la peor caída del año, arrastrada sobre todo por el retroceso de afuera. El Merval terminó con un sangriento retroceso de 5,75% hasta la zona de los 1.044,64 puntos, el peor rojo desde el 1 de diciembre del año pasado. El indicador ya pierde 3,24% en lo que va del año, cuando transcurrieron las primeras trece ruedas.

El derrumbe de ayer fue liderado por los papeles bancarios y petroleros, afectados por la delicada situación que viven las empresas de ambos sectores en los países centrales y por el fuerte repliegue en un principio en el precio del crudo. Sin embargo, el barril de petróleo logró repuntar a media rueda y terminó con ganancias del 6,1%, finalizando la rueda en u$s 38,74 en Nueva York.

Así y todo, Tenaris y Petrobras Brasil, las dos compañías controlantes del Merval, no lograron repuntar y hundieron al índice, cayendo 7,45% y 6,74%, respectivamente. El volumen de operaciones volvió a ser un desierto: se hicieron apenas por encima de $ 32 millones en renta variable. “La caída fue pronunciada, pero tampoco hay pánico. Los negocios están parados. Para poder hablar de una leve recuperación, se necesita un nivel mínimo de al menos $40 millones”, sostuvo Leandro Verrier, de Bull Market Brokers. Pero lo esencial es la todavía y cada vez más delicada situación del sector financiero. “Los bancos siguen muy mal. Es más, en la era Obama se habla de una tendencia hacia una nacionalización del sector. Será un sistema mucho más regulado y menos apalancado en lo que se denomina el nuevo capitalismo. En este contexto, los bancos tienen todas las de perder”, explicó el analista.

En el mercado de títulos públicos también se notó la ausencia de grandes operaciones ($178,65 millones), pese a que los analistas reconocen buenas perspectivas por los rendimientos que prometen las series de renta fija ya con un disipado temor a un default. En este contexto, los bonos más cortos resultan más favorecidos. El Boden 2012, por caso, terminó 0,54%, mientras que el Pre9 avanzó 0,88%. En tanto, el Par y el cupón PIB no registraron movimientos. “Los bonos están bastante tranquilos porque los commodities están mostrando una mejor performance. Además las caídas se están dando por factores externos. No hay malas noticias locales que puedan aumentar el riesgo de un default”, confío un operador. No obstante, en el mercado inquietó la reunión de Cristina Fernández de Kirchner con Raúl Castro en Cuba. “Cristina sale criticar a Obama por el bloqueo cubano justo el día de su asunción a la vez que la reunión con el líder de ese país transcurrió bajo un total hermetismo”, señalaron. En el mercado no cayó bien la falta de declaraciones oficiales de esta reunión. Y es que si no se prueba un claro objetivo para justificar la gira oficial, la city se mostrará pesimista.

Por otro lado, el dólar en casas de cambio siguió a $3,44 para la compra y $3,47 para la venta. El tipo de cambio mayorista terminó unas milésimas arriba a $3,460. La suba estuvo direccionada por la estrategia del Banco Central a partir de compras en la última parte de la rueda.

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