Desde la organización informaron que “Rojo Vivot los recibió de a uno por vez, y pidió sus contactos para comunicarse personalmente para dar fecha de la reunión” sin embargo “el lugar comenzó a llenarse de gente, que al enterarse que el funcionario iba a atender al público,concurrió al lugar para buscar una solución a esos problemas”.

Asimismo explicaron que “en el tiempo que estuvimos allí, pudimos constatar una vez más, los efectos nefastos de las políticas que lleva adelante el Gobierno provincial en relación a la discapacidad. Nos encontramos con numerosos casos de pensiones suspendidas por cuestiones administrativas, bajas de pensiones porque al momento de renovar los certificados la nueva junta médica considera que la persona mágicamente se recuperó y ya está apta para trabajar, problemas con la cobertura de las obras sociales, y demás situaciones que venimos denunciando y que son sistemáticamente desmentidas por el gobierno”.

Otro problema que se sumó a los ya enumerados fue “la accesibilidad de esta oficina se vio notablemente agravado por la cantidad de personas que se presentaron en el lugar. Así la falta de espacio físico, la rampa con barandas rotas, y el lugar sin accesibilidad para circular en silla de ruedas fueron una traba más que las personas con discapacidad tuvieron que enfrentar”.

Además desde la Comisión se denunció que “mientras los funcionarios de segunda línea levantaban sus hombros a modo de respuesta cuando se le pedía alguna solución, el responsable del área mantuvo durante horas a la gente en la sala de espera para poder hablar con él”.