Casi 50 años después, "Vuelve la morena rebelde". Bidú Cola nació en 1940, dos años antes de la llegada de Coca-Cola al país. Hizo furor hasta que la empresa fue comprada por la fabricante de Crush, luego pasó a manos de Coca Cola y desapareció. Los 2,250 litros se venden a $120 pero lanzaron una promo dos por tres.
Por: Graciela Moreno.
Desde el barrio de Quilmes, la familia Delfino dueña de la pyme Bebidas Mass relanza la marca Bidú. La gaseosa que nació en 1940, hizo furor en la décadas posteriores hasta que fue vendida a sus competidores y en 1974 se dejó de fabricar. En sólo 34 años hizo temblar a marcas multinacionales. Se vende ya en 12 provincias y prepara un fuerte desembarco en CABA y el conurbano para el verano, bajo el slogan "Vuelve la morena rebelde".
La Bidú Cola fue creada por Genesio y Abramo Monti, dos hermanos e inmigrantes italianos. Instalaron la fábrica Unión Italiana Hermanos Monti en Luján, en la provincia de Buenos Aires. Allí elaboraron cervezas, licores, sodas, amaretto y fernet. Crearon la Bidú en 1940 y 32 años después ya se vendía en varios países en Sudamérica, principalmente en Perú, Ecuador y Venezuela. The Orange Crush Co compró la fábrica, en 1963, Crush dejó de envasarla. En 1972, fue adquirida por Coca-Cola y desapareció del mercado.
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Hace siete años, la marca fue adquirida por Franco Delfino. Un emprendedor que lo intentó todo, en los ’90 lanzó su marca de gaseosas Figuretty por problemas societarios quebró. En 1996, fundó Bebidas Mass, produce soda, agua, Fernet Forte (fernet y Bidú Cola) con 8% de graduación alcohólica y clásico con 4%.
Pero el gran invento es la soda con limón. “Mi papá inventó la soda con limón y es la única del mercado. Diseñó un sifón especial que tiene 1,750 ml. que entra justo en la puerta de la heladera y permite que no se desperdicie nada, como pasa con los sifones tradicionales. Se está vendiendo muy bien en Córdoba, Santa Fe y La Rioja, es furor”, explicó Luciana Delfino, la gerenta de marketing de Bebidas Mass. En breve, llegará a Buenos Aires y CABA.
En la empresa trabajan 12 personas, seis son de la familia. Franco y su mujer María Alejandra, sus hijas Carolina y Camila y dos sobrinos. Hace siete años, Franco Delfino compró la marca Bidú y gracias a un ex empleado Fernando Doldán, lo contacta con Carlos Bernacchi, el creador del sabor quién estuvo viviendo en Atlanta. El dueño de Bidú recibió la fórmula de regalo y se animó a relanzarla.
Bidú Cola busca distribuidores
Bidú se produce en sabor cola, lima y naranja. Eligió llegar primero a las principales provincias del país para luego plantar bandera en suelo porteño y en el conurbano. Se comercializa en: La Rioja, Córdoba (Villa María y Río Tercero), Buenos Aires (San Nicolás, San Pedro y la semana que viene Pergamino), Entre Ríos (Concordia y la semana que viene Paraná), Santa Fe (Rosario, San Jorge, Santa Fe capital y San Justo), Santiago del Estero, Chaco, Tierra del Fuego, Río Negro (Bariloche), Neuquén y Salta, desde la semana que viene.
Cuentan con una línea de llenado de 9000 botellas por hora que funciona al 50%. Por ahora lanzaron un solo formato 2,250 litros. “Tenemos una promo lanzamiento comprando dos botellas, se entrega otra de regalo. A los distribuidores les ofrecemos dos pallets y uno de regalo, pero queremos que la misma oferta le llegue al consumidor final. Cada botella está $120, o sea que por tres botellas que son un total de 6,750 litros pagan $240. Buscamos distribuidores para zonas nuevas en las que aún no llegamos deben tener distribuidoras, no nos manejamos con representates”, explicó Luciana Delfino.
Edición especial de Bidú Cola
Tienen varios proyectos: “En pocos meses más, lanzaremos un nuevo envase de Bidú, con un diseño especial que la hará muy reconocible. Además, estamos preparando una edición especial de 500 ml. de vidrio, será un homenaje a la histórica Bidú”, contó Delfino. Por ahora, no piensan en lanzar versiones light, pero no lo descartan.
Cuando se les pregunta si van a disputarle mercado a Manaos, que justamente no se está vendiendo en las cadenas de supermercados, responden: “Es competencia por cómo están posicionados en el mercado, pero no en cuanto a la calidad”. Tan confiados están con el sabor de Bidú Cola que hasta se atreverían a utilizar una fuerte herramienta de marketing: “Obvio que nos animamos al Desafío Bidú”. Podrían hacer catas a ciegas de bebidas cola.
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