Si bien en todo el mundo se aguarda a que la vida vuelva a la normalidad, lo cierto es que todavía no hay certezas acerca de cuándo ocurrirá eso.

De hecho, hay grandes esperanzas de que la vacunación pueda traer algún tipo de normalidad, aunque a pesar de eso, los científicos están cada vez más convencidos de que el coronavirus llegó para quedarse.

En enero pasado, la revista científica Nature preguntó a más de 100 inmunólogos, virólogos y expertos en salud de todo el mundo si se podía erradicar el Sars-Cov-2, y casi el 90% de los encuestados dijeron que no. Por la evidencia que hay, muchos aseguraron que es probable que el coronavirus se convierta en endémico y continúe circulando en el mundo.

La realidad es que erradicar las enfermedades infecciosas no es algo sencillo. Incluso, hasta la fecha, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado solo dos enfermedades virales oficialmente erradicadas: la viruela y la peste bovina.

El principal problema que se tiene hoy en día es que, desafortunadamente, las vacunas contra el Covid-19 desarrolladas hasta ahora no han logrado erradicar al virus.

"Las vacunas que tenemos hoy en día en algunos casos no previenen la infección. Simplemente modifican la infección y hacen que la enfermedad sea menos grave. Las personas vacunadas aún pueden transmitir el virus a otras", dijo a la BBC David Heymann, profesor de epidemiología de enfermedades infecciosas en la Escuela de Salud y Medicina Tropical de Londres.

 

 

"El Covid nunca desaparecerá", anticipó Paul Hunter, profesor de medicina de la Universidad de East Anglia (Reino Unido). "Es inevitable que nos contagiemos repetidamente por el resto de nuestras vidas, ya sea que nos hayamos vacunado o no", agregó.

El profesor Heymann es uno de los muchos expertos que creen que este virus se convertirá en una enfermedad endémica, lo que significa que seguirá circulando en grupos de la población mundial durante los próximos años.

Esto no es algo nuevo, ya pasa con los virus de la gripe y los cuatro coronavirus que causan los resfriados comunes. De hecho, la OMS calcula que entre 290.000 y 650.000 personas en todo el mundo mueren cada año por causas relacionadas con la gripe. Pero la diferencia radica en que estas enfermedades se han vuelto manejables, con un número de muertos que puede estimarse anualmente.

Por eso mismo, muchos científicos esperan que este sea también en un futuro el caso del Covid-19. En este escenario, el virus se mantendría, pero las personas deberían desarrollar cierta inmunidad a través de la vacunación y las infecciones naturales.

El problema aquí es que todavía no sabemos si este virus realmente se comportará de esa manera, ya que según Heymann, es "muy inestable".

"Cuando este virus se replica en células humanas, muta de vez en cuando. Y algunas de esas mutaciones son motivo de preocupación", comentó, como es el caso de la variante Delta, que en India hizo estragos y en muchos otros países generó y genera preocupación.

"Desde un punto de vista evolutivo, el virus necesita mutar para que pueda infectar más personas. Un virus exitoso es el que se propaga más fácilmente", indicó Trudy Lang, profesora de Salud Global en la Universidad de Oxford.

Por eso es que durante este año y medio de pandemia, el coronavirus ha desarrollado al menos cuatro variantes principales. Lo que ahora está en pleno estudio, es la eficacia de las vacunas contra estas variantes, y si además se precisará de una tercera dosis como refuerzo, ya que los científicos aún no saben cuánto tiempo durará la inmunidad.

En cuanto al uso del barbijo, algunos sostienen que seguirlo usando en la nueva normalidad podrá resultar efectivo, sobre todo cuando se trate de personas enfermas o gente que utilice transportes públicos. De igual modo, el aislamiento seguirá está presente si se lo necesita, tal como ha sucedido hasta ahora: cuando la situación epidemiológica empeora, se acude a cierres.