Unos 600 testigos declaran en el juicio "Jefatura-Arsenales II"

Hoy comienza en Tucumán la primera megacausa por delitos de lesa humanidad. Se juzgarán crímenes cometidos contra 235 víctimas. Hay 44 imputados, entre ellos el ex represor Menéndez.

Alrededor de 600 testigos repasarán a lo largo de los próximos meses los horrores vividos durante la última dictadura militar. Desde hoy y hasta mediados de 2013, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Tucumán (TOF) llevará las riendas de la primera "megacausa" en la que se investigan delitos de lesa humanidad cometidos durante los '70.

A partir de las 9, los jueces Carlos Jiménez Montilla, Gabriel Casas y el subrogante Juan Carlos Reynaga presidirán la primera audiencia del juicio oral "Jefatura II-Arsenales II". Como en todo proceso, se realizará la lectura de acusación y el Ministerio Público Fiscal leerá una síntesis del pedido de elevación a juicio. Tras tomar conocimiento de los cargos que se les imputan, los sospechosos tienen la posibilidad de declarar, y podrán negarse a hacerlo sin que eso afecte su situación.

En el expediente las víctimas suman 235, entre desaparecidos y sobrevivientes. La mayoría de los que están vivos prestarán declaración como testigos. Entre los damnificados hay familias enteras, políticos, estudiantes, militantes, estudiantes, conscriptos, policías y trabajadores. Entre las víctimas también había cinco mujeres embarazadas. Además, hay denuncias de abusos sexuales. Las víctimas de estos delitos serán resguardadas y no trascenderá su identidad.

De los 44 imputados, ocho estarán en el hospital del servicio penitenciario de Ezeiza y participarán del juicio mediante el sistema de teleconferencia. Entre ellos, Luciano Benjamín Menéndez y Ernesto Alaiz. El resto está en la cárcel de Villa Urquiza y será trasladado con custodia. Mientras dure la lectura de las acusaciones, deberán estar en la sala de audiencias. Durante el resto del debate, podrán estar en la llamada sala contigua. En este caso, se habilitó un espacio en el subsuelo del edificio que cuenta con un sistema de video para que sigan el desarrollo de las jornadas.

La megacausa también tiene otros elementos distintivos. Por primera vez en Tucumán, tras cinco juicios por violaciones a los derechos humanos, se juzgará a mujeres: María Elena Guerra (civil) y María Luisa Acosta de Barraza (ex policía del D2 y de la ex Jefatura). Ambas fueron las primeras mujeres en ser recluidas en la cárcel de Villa Urquiza. Están alojadas en la Enfermería del penal. También será la primera vez que se juzgue a civiles por crímenes de lesa humanidad en la provincia. Son cuatro: María Elena Guerra (por usurpación), Juan Carlos Benedicto y José Eloy Mijalchyk (capellán del Arsenal) y Francisco López Guerrero.

Según el expediente unificado, tanto la ex Jefatura de Policía como el ex Arsenal fueron Centros Clandestinos de Detención (CCD) que formaron parte del circuito represivo que funcionó en la provincia. La dependencia policial era, usualmente, el primer lugar al que eran llevados los detenidos en el área de la capital. Mientras que el predio militar fue un sitio de exterminio. Varios de los cuerpos hallados en la fosa del ex Arsenal corresponden a víctimas de la megacausa.

Sólo durante esta semana el juicio se extenderá hasta el viernes. Luego, las audiencias se harán los jueves y viernes hasta diciembre (excepto la última semana, en que no habrá). El año que viene, tras la feria de enero, podrían sumarse los miércoles, cuando concluyan procesos de similares características en otras jurisdicciones. Durante el juicio, el Ministerio Público fiscal será representado por el fiscal de Cámara Leopoldo Peralta Palma (subrogante) y por los fiscales ad hocPablo Camuña y Patricio Rovira. El secretario del TOF, Mariano García Zavalía, confirmó que habrá al menos 600 testigos y que la intención es que declaren 10 por jornada. Detalló que algunos residen en el exterior y que testificarán mediante videoconferencia. En tanto, también hay videos de testimonios que serán incluidos en la causa con ese formato. Se trata de los de aquellas personas que declararon en causas anteriores. No obstante, si surge algún pedido, podrían volver al recinto.

Comentá la nota