Stella Casasola: “La idea es mostrar que el Estado está presente”

Stella Casasola: “La idea es mostrar que el Estado está presente”
Stella Casasola destacó el rol de RENATEA, registro que tiene la finalidad de que todos los trabajadores agrarios estén registrados, a poco tiempo de haber asumido como Jefa de la Sección V
Muchos de los trabajadores que se dedican al rubro de la cosecha desconocen cuáles son sus derechos y garantías. Son varios los que ni siquiera han tenido la oportunidad de recibir una educación primaria y/o secundaria, y sus jornadas laborales se extienden a más de 10 horas diarias. Es aquí donde RENATEA (Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores Agrarios), bajo su lema “Garantizando Derechos – construyendo Inclusión”, participa garantizando que los derechos laborales sean para todos de la misma manera.

El Registro, un ente autárquico que depende del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, fue creado por la Ley Nº 26727, sobre el Nuevo Régimen de Trabajo Agrario. El mencionado organismo tiene como función principal la registración, fiscalización y seguridad social para todos los trabajadores y trabajadoras del sector.

A su vez, se encarga de registrar y otorgar una Libreta de Trabajo Agrario, que es de uso obligatorio en todo el país, por la cual quedan asentados la relación laboral, las contribuciones y aportes.

También brinda la prestación por Desempleo y servicio de sepelio para todos los trabajadores activos, desempleados o en período de receso laboral. La entidad destaca que “no se pueden pactar condiciones de trabajo menos favorables para el trabajador que las contenidas en la ley”.

En ese contexto, Stella Casasola dialogó con “el Retrato…” a poco de haber asumido funciones como Jefa de la Sección V de RENATEA.

“Cuando arranqué me pregunte mucho de qué se trataba todo esto y cuando comencé a estudiar y leer un poco, me pareció una herramienta maravillosa. Cuando Cristina habla de empoderar a los excluidos, se trata de darles aquellas herramientas que les permite que todos seamos iguales”, dijo la excandidata a concejal por el Frente para la Victoria.

-¿Cree que por estar en el medio del campo no se les presta tanta atención a los trabajadores?

-Justamente, en el operativo que realizamos nos costó mucho llegar al campo, no los encontrábamos. El operativo fue junto a la AFIP, ARBA y el Ministerio de Trabajo de Provincia y Nación. Cuando llegamos vimos a los trabajadores en el medio de la nada y sin conocimientos de cuáles son sus derechos. No sólo desconocían si tienen o no una Asignación, sino que además se encontraban sin ropa de trabajo. La mayoría de los trabajadores del campamento eran tucumanos y notamos que no tenían ni siquiera agua caliente para ducharse. “A ellos les da lo mismo” nos comentaron los empleadores. Es decir, creo que ese encargado ni siquiera tomaba conciencia de lo que estaba diciendo. Existe una mala concepción de que esto es cultural. Pero creo que estos son mitos culturales, no se trata de una cuestión cultural. Los empleadores a su vez, nos explicaban que “para qué vamos a ponerles comedores o buenos lugares para dormir, si total ellos no los usan”. Realmente todo esto fue lamentable.

-¿Había extranjeros o sólo argentinos?

-Eran todos argentinos. Además, en ningún momento tampoco vi la presencia de niños. Los campamentos eran unos carromatos enormes donde en uno se dormía, en otro se comía y en el medio del campo estaban las letrinas. Por suerte nos tocaron todas personas documentadas. A mí me chocó un poco y me llamó la atención porque muchos de esos trabajadores eran jóvenes, tenían la edad de mis hijos y realmente se encontraban en medio de la nada.

-¿Cómo opera RENATEA?

-Trabajamos con una libreta, que es maravillosa. El trabajador se la entrega al empleador al momento que inicia el trabajo y el empleador debe devolvérsela cuando el trabajo se termine. Dicha libreta consta de los días trabajados, el monto que le pagaron, todo.

-¿Quién debe inscribirse en este Registro: el empleador o empleado?

-Cualquiera de los dos. El trabajador puede inscribirse por cuenta propia. Lo que hacen algunos empleadores es inscribir a aquellos que no tienen libreta y no figuran en el Registro. Lo más importante es que, cuando el trabajador no esté trabajando, tenga su libreta. Porque si el trabajador no encuentra otra cosecha, tiene así un seguro de desempleo. Esto es por acuerdo con ANSES, a través de éste se les paga un seguro de desempleo.

-¿Cómo llegan al lugar? ¿Por medio de alguna denuncia?

-En realidad este operativo ya estaba organizado con ANSES, AFIP, Ministerios de Trabajo (Nación y Provincia), RENATEA, Seguridad e Higiene. Se realizó una vez buscadas aquellas zonas en Tandil donde se estaba cosechando. Se relevaron alrededor de cinco campos.

En uno de los operativos se encontraron con problemas de Trata de personas, por lo que se levantó el operativo y nos movilizamos a realizar las denuncias. Otro de los días se relevó tres campos más. La idea es instalar el tema y que la persona que tiene trabajadores, los declare. En muchos lugares no cuentan con medidas de seguridad, como por ejemplo, disyuntores.

Estamos tratando de instalar una oficina en Mar del Plata y una vez puesta todo va a hacer un poco más fácil. Trabajamos con referentes territoriales. En algunos lugares son referentes directos de RENATEA, en otros, se trata de gente convenidas por las municipalidad. Nuestra sede, la quinta, se encuentra en Necochea.

En ese marco, Casasola subrayó que “la idea es mostrar que el Estado está presente y esto es bueno que sea así. Es bueno cuando uno ve que hay inclusión, nos falta mucho, pero estamos trabajando hacia eso”.

De paso, anexó que “cuando a un trabajador rural se les cae esa cosecha y se queda sin trabajo, automáticamente pasa a cobrar por ANSES una Asignación, un Seguro de Desempleo y el beneficio de una obra social, pero el problema es que ellos no saben todo esto, nadie se los dijo. Hay mucho desconocimiento”.

De igual manera, según dijo, “todo esto de RENATEA es muy nuevo y reciente. Cuando se avanza en la instalación del ejercicio de derechos, a algunos les molesta. ARBA nos comentaba que están exentos de abonar los impuestos, entonces que los trabajadores se encuentran en malas condiciones laborales, es lamentable. La bolsa de papa se la pagan $6 y se venden a $25. Lo bueno de todo esto, es que se ha logrado una muy buena coordinación y predisposición por parte de todas las entidades que participamos del operativo. Es muy fructífero saber que podemos garantizar los derechos, es el Estado presente”.

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