En la subsede de Weymouth, ubicada a unos 220 kilómetros al sur de Londres, la dupla argentina escoltó a la pareja australiana compuesta por Mathew Belcher y Malcolm Page, ganadora del oro, y a la británica conformada por Luke Patience y Stuart Bithell, que se llevó la presea de plata.

Calabrese-De la Fuente consiguieron así la segunda medalla para la Argentina en estos Juegos Olímpicos, luego de la de bronce obtenida por el tenista Juan Martín Del Potro. Las Leonas ya tienen asegurada la tercera, aunque aún resta saber si será de oro o de plata.

De esta forma, no sin un poco de suspenso, el yachting le entregó su quinta medalla consecutiva a Argentina, en una cadena iniciada por Carlos Espínola en los Juegos de Atlanta 96 y que había tenido su último eslabón en Beijing 2008 con un bronce de aquel deportista correntino y Santiago Lange en la clase Tornado.

Calabrese pudo festejar en su debut olímpico, mientras que para De La Fuente significó su segundo éxito en este tipo de competencias ya que también había logrado la medalla de bronce en 470 junto a Javier Conte en los Juegos de Sydney 2000.

“Demostramos que se puede luchar con los países fuertes si se trabaja en forma seria y consistente. La vela sigue dando resultados“, dijo De La Fuente.