Para los concesionarios representantes de las automotrices más importantes de la ciudad, la última etapa del Procreauto fue decididamente “mala”, por la escasa oferta de unidades, en contraposición a la primera fase que logró un “importante” caudal de ventas, sobre todo en las unidades de gama baja y media, sustentadas por una línea de crédito “muy buena” financiada por el Banco Nación.

“El Procreauto I generó muchas ventas de vehículos, gracias a una tasa de interés baja que ofrecía el Banco Nación y a que el Gobierno dispuso de autos 'a demanda'. Es decir: a medida que el banco aprobaba el crédito a un cliente, se disponía de autos para la venta. Todo lo contrario con el Procreauto II, donde el Gobierno no tuvo intención y acordó apenas 1.000 autos –de la marca- para todo el país”, aseguró Martín Melegari, gerente de ventas de Autos del Mar, concesionario Renault a 0223.

Intentando explicar los motivos de que la segunda etapa no haya sido exitosa como la primera, Melegari contó que “la suba en la inflación en el último semestre del año pasado, hacía inviable una prórroga y quizás esto fue lo que de entregar 'a demanda' el modelo Clío –el más vendido- en los últimos meses nos cedieron a nuestra firma apenas 30 unidades. Y todo por decisión del Gobierno, que acordó eso con las automotrices”, añadió.

El mismo panorama ofrecieron desde Simone Automotores, concesionario oficial Ford en Mar del Plata. Desde la empresa, referente de ventas a nivel nacional de la marca del óvalo, señalaron a este diario digital que la primera etapa del Procreauto “produjo mucha afluencia de público, como consecuencia de que el programa tenía una línea de crédito muy buena".

"Y esto se reflejó en una buena inyección en las ventas. A pesar que nuestro auto más económico era el Focus, un vehículo de gama media alta”, recordaron.

Pero al momento de evaluar la segunda –y última etapa- del Procreauto, desde la concesionaria indicaron que el vehículo –acordado entre la automotriz y el Gobierno- fue una camioneta de cabina simple –la Ranger- “un vehículo de trabajo, que tuvo éxito en otras localidades pero que no se vendió en Mar del Plata”, precisaron.

“Al programa le faltó tiempo. El crédito era muy bueno. Pero al ser autos de fabricación nacional, quedaron excluidos el modelo Ka y el Fiesta, que hubieran generado un boom de ventas. Una lástima que no se profundizó (el Procreauto), porque nos hubiera dado un importante caudal de ventas”, indicaron.

Por su parte Jesús Abraham, ejecutivo de cuentas de Romera Hnos., representante Volkswagen en Mar del Plata, informó a 0223 que el Procreauto I “tenía excelentes tasas de financiación, en muchos casos con hasta un 90% del valor total del auto”. “Movió el avispero, ya que  trajo gente a las concesionarias y derivó en ventas de 0km con `precios cuidados´, que fueron el Suran y la camioneta Amarok”.

Pero en contraposición, el responsable de ventas sostuvo que en la última etapa del plan del Gobierno Nacional “no se vendió nada”.

“Estos precios generaban un desfasaje con otros modelos. Y no había disponibilidad de terminales, a pesar de los numerosos crédito aprobados de clientes que ya habían pasado por el Banco Nación. A muchos en los últimos meses les tuvimos que decir que no”, confesó Abraham.