Una treintena de municipios bonaerenses negocian con el Gobierno bonaerense una ayuda económica extra para pagar los salarios y los aguinaldos de diciembre, y la Provincia buscará a cambio poner “en caja” a los distritos para que adhieran al Pacto Fiscal, con la intención de reducir sus déficits y evitar que esta situación se replique el próximo año. (Nota de la redacción: Rojas, según señalaron fuentes oficiales viene bien acomodado para afrontar sueldos y aguinaldo - No habrá bono de fin de año.)

Según pudo saber DIB, 31 comunas se encuentran con serias dificultades financieras para afrontar los gastos de personal en el fin del año, una época particularmente sensible por la celebración de las fiestas.

Para ello, la Provincia intercederá ante Nación para tramitar Aportes del Tesoro Nacional (ATN), de modo que los municipios en problemas puedan cumplir con sus obligaciones sin asumir nuevas deudas.

En el Gobierno destacan, no obstante, que a fines de 2015, en los primeros días de la gestión de María Eugenia Vidal, había más de 100 distritos en problemas: la mayoría culpaba a la “herencia recibida” recientemente, y daba cuenta de cajas “en cero” para afrontar el último mes de salarios.

Si bien el número de comunas que pide auxilio se achicó considerablemente, los intendentes en problemas ya no pueden culpar a sus antecesores, por lo que el Ejecutivo provincial los “invitará” a adherir al Pacto Fiscal bonaerense, aprobado semanas atrás por la Legislatura, que como contó DIB incluye la eliminación del déficit, la reducción de contrataciones de personal y la armonización de los sistemas impositivos locales entre sí y con la Provincia.

De las 31 comunas complicadas, 23 son gobernadas por Cambiemos: en la lista aparecen Mar del Plata, Bahía Blanca, Berisso, San Vicente, Azul y Pinamar. En tanto, también aparecen complicados los intendentes kirchneristas de Moreno y José C. Paz, y el massista Facundo López, de Necochea.

Como informó DIB días atrás, en varias comunas del interior bonaerense se evidencian problemas para el pago de salarios y el medio aguinaldo. En Balcarce, por caso, el intendente Esteban Reino dijo que analiza pedir una ayuda económica a la Provincia para poder cumplir en tiempo y forma. “Nosotros venimos de una situación muy compleja y en estos casi dos años hemos tratado de ir ordenando los números pero todavía nos está costando disminuir el fuerte déficit que nos dejó el gobierno anterior”, dijo.

En tanto, en Chascomús, desde el Ejecutivo local admitieron en los últimos días que sin el presupuesto 2017 -que fue votado en el Concejo, pero vetado por el Ejecutivo, disconforme con las modificaciones- no pueden asegurar los sueldos hasta fin de año.

Problemas similares se registran en Necochea, Bahía Blanca y Tres Arroyos, donde los gobiernos locales buscan aplicar medidas de “austeridad”, como la reducción de horas extra, para evitar una sangría mayor de fondos.

Condiciones

Sin posibilidades de otorgar adelantos de Coparticipación (deben devolverse el mismo año que se otorgaron), y con pocas chances de sacar fondos propios, el Gobierno bonaerense negocia con el Ministerio del Interior el aporte de ATN.

Como se trata de fondos que no se devuelven, en el Gobierno bonaerense buscarán otro tipo de “contraprestación”: pedirá a los jefes comunales que adhieran al Pacto Fiscal para bajar el déficit y limitar la contratación de personal, de modo de evitar estos problemas en el futuro.

Sin esa adhesión, recuerdan en la Gobernación, a partir del 1° de enero los municipios no podrán endeudarse ni recibir ayuda económica de Nación o Provincia si no cumplen una serie de metas fiscales e impositivas que serán monitoreadas por el Gobierno provincial.