El gobierno provincial decidió poner la plata que Nación se niega para la construcción de escuelas. Así lo anunció la Provincia, que explicó que tomó la decisión de licitar y se continuará con el financiamiento de las obras de construcción de la escuela primaria y del colegio secundario del Barrio FoNaVi de 1.702 viviendas de Santa Rosa (los barrios que están en la zona sureste de la capital pampeana).

Estas obras, originalmente financiadas por el gobierno nacional, vieron su contrato de ejecución rescindido en 2015, y la Provincia ya no recibió los fondos para continuarlas.

Durante meses los reclamos de los ciudadanos se hicieron sentir en diversos ámbitos. La cantidad de población que hay en el lugar torna imperioso la existencia de establecimientos educativos a la mano. Porque además se ha sumado el problema del transporte: numerosos chicos de esas barriadas encuentran serios obstáculos para llegar a las escuelas y colegios lejanos a que deben concurrir ante la carencia en su propia zona.

Hoy, la construcción de la escuela primaria cuenta con un presupuesto oficial de $24.941.625 y un plazo de ejecución de 360 días corridos.

La apertura de licitación (N° 2/16) se estableció para el día 18 de mayo a las 10:00 horas por Decreto 615/ 16. Mientras, la obra del colegio secundario cuenta con un presupuesto de $30.501.722 y un plazo de 360 días. Por Decreto 610/ 16 se formalizó el llamado a licitación para el próximo 20 de mayo también a las 10:00 horas.

Debido a la rescisión del contrato, la escuela primaria está ejecutada en un 26% aproximadamente por la empresa que la tenía a su cargo, por esto se deberá continuar con la obra para responder a una necesidad concreta de solucionar la demanda educativa en dicho barrio. En el caso del colegio secundario está ejecutado en un 15%.

Dichos establecimientos educativos están ubicados en el Barrio FoNaVi de 1.702 viviendas, delimitado por las calles Corona Martínez, C. Gaich, N. Toscano y A. Grassi.

Abarcarán una superficie de 1.301,40 m2 y contarán con 6 aulas, sanitarios, un SUM con depósito y cocina, un taller, una biblioteca, dirección y secretaría. Sobre un extremo de la circulación se propone una salida de emergencia, y sobre el otro, un patio destinado a la biblioteca. El acceso será en un punto central que actuará como hall distribuidor. Este hace de nexo también entre la calle y el patio del colegio.

El terreno está en un área de cuatro manzanas destinadas a espacios verdes, en dos de estas se erige la escuela primaria, el colegio secundario y un jardín de infantes.

El lote tiene una característica particular, una topografía con desniveles significativos, y por esto se ha tomado como premisa ubicar la escuela sobre la calle central y en forma perpendicular a la mayor pendiente, para poder lograr un mejor emplazamiento edilicio. Con esto también se logra un ingreso a la escuela más tranquilo por ser una de las calles menos transitada.