“Se puede advertir un desarrollo importante de Rafaela en el intenso movimiento comercial de los bulevares, en la zona de los bancos y en los nuevos edificios, las torres constituyen un símbolo de ese crecimiento”, subrayó el burgomaestre de la ciudad alemana que llegó por primera vez en 1981 para firmar el acta de hermandad con Juan Carlos Borio, quien por entonces estaba al frente de la Municipalidad local.

Henne visitó la Redacción de LA OPINION junto a Elsa Dellasanta, quien integra el Instituto Cultural Germano Argentino y actúa como traductora a tiempo completo, más allá de que cumple un papel protagónico en la relación de amistad que supieron construir Sigmaringendorf y Rafaela. “Para mí es un placer colaborar en esta hermandad”, sostuvo Dellasanta.

El alcalde alemán remarcó que le llamó “una especial atención el tramo de autopista que se construyó sobre la Ruta 34 y que jerarquizó todo el sector, y puntualmente el que comprende la calle colectora que se llama Sigmaringendorf, que en 2001 era semirural y ahora está altamente urbanizado”. Asimismo, dijo que sentirse “reconfortado” al conocer que también hay una plaza que llevará el nombre de su pueblo en las nuevas urbanizaciones de la zona de quintas”.

-Usted ha vivido el hermanamiento desde el principio, ¿Qué balance realiza de todo el proceso?

-Estoy totalmente involucrado desde 1981, desde que firmamos con Juan Carlos Borio el acta de hermandad. Nunca dejé de ocuparme para que esta relación prosperara. Y con el compromiso de todos los rafaelinos también hemos podido organizar en forma conjunta tantas visitas en las dos direcciones. Los constantes intercambios estudiantiles mediante las pasantías, las visitas de los coros, la comunicación permanente entre las comunas han permitido fortalecer esta relación. Pero también, más allá de las formalidades, adquiere gran importancia los viajes que los rafaelinos hacen a Sigmaringendorf en forma privada y los que hacen nuestra gente a Rafaela. Los lazos entre la gente, entre los amigos de aquí y de allá, actualizan el hermanamiento en forma permanente.

Henne, que se confiesa simpatizante de Suttgart, equipo que milita en la primera división del fútbol alemán, lamentó no poder asistir al partido que jugaron Atlético de Rafaela y Argentinos Juniors. A esa hora su compromiso fue la presentación del libro "Desde Sigmaringendorf a Argentina: la historia de Guillermo Lehmann, fundador de colonias", que se hizo en el Museo Histórico Municipal de Rafaela y que estuvo a cargo de uno de sus autores, Anton Haug –la otra es Erika Rosenberg-band-.

“La presentación de los libros es un eslabón más en esta cadena de acciones para fortalecer el vínculo entre ambas comunidades”, sostuvo Henne en referencia a la flamante publicación sobre Lehmann que se presentó ayer y también a la obra que escribió el Dr. Guillermo Lehmann, bisnieto de Guillermo Lehmann, denominada "La Colonia Esperanza y el Ferrocarril del Rosario a Córdoba".

Burgomaestre de Sigmaringendorf desde hace 31 años, Henne admite que aún no definió si continuará en el cargo. “El año que viene tenemos elecciones, pero aún no decidí si volveré a presentarme, a pesar que la gente así me lo demanda”, apuntó. ¿Qué opina la familia? “Por un lado quisieran (su esposa Karin y sus hijos Mathias y Johannes) que descanse, que me tome un tiempo después de tantos años de servicio, pero por el otro no saben cómo seré a tiempo completo en casa… no saben si me podrán aguantar…” dice sonriente.

Su permanencia al frente del gobierno de Sigmaringendorf tiene fundamentos objetivos. Entre otros, la Comuna no tiene deudas, y a partir de esta prolijidad en la administración de las finanzas públicas Henne ha sido convocado por bancos regionales para integrarse como una especie de auditor. “Que un político cumpla esta función no es común ni siquiera en Alemania”, destaca Dellasanta.

Henne hoy viajará a Santa Fe donde compartirá momentos con los descendientes de Lehmann. “Espero volver” concluye, muy cordialmente, mientras deja sus felicitaciones por el cumpleaños 90 de este Diario.