Complicidades en los ámbitos policial y municipal habrían permitido que dos prostíbulos continuaran en funcionamiento hasta el fin de semana, según se denunció ayer en la Fundación María de Los Ángeles, que preside Susana Trimarco. Esa entidad fue la que denunció en la Justicia Federal al ex policía Hugo “El Gato” Díaz, quien quedó detenido el sábado, cuando Gendarmería Nacional allanó dos locales donde se habría ejercido la prostitución y que serían de su propiedad.

“El año pasado, la fundación presentaba una denuncia ante la Justicia Federal e inmediatamente Gendarmería Nacional empezó a hacer averiguaciones preliminares, juntó información y se empezó a consolidar la denuncia, que terminó con los allanamientos del sábado”, resumió Agustín Aráoz, uno de los abogados que trabaja con Trimarco.

De acuerdo a las palabras del letrado, la denuncia apuntaba contra dos supuestos prostíbulos que pertenecerían a “El Gato” Díaz: “Night Club”, ubicado en el pasaje Sargento Cabral, frente a la ex Terminal de Ómnibus, y “El Límite”, que funcionaba en calle Alsina al 700. Ambos fueron allanados y clausurados el fin de semana. “Fueron detenidas cuatro personas: ‘El Gato’ Díaz, su mujer, un encargado principal y un empleado. También se encontraron a cinco mujeres presuntamente víctimas de trata de personas”, agregó.

Respecto a los secuestros, el abogado ratificó que hallaron dos vehículos, una gran cantidad de dinero en efectivo y documentación de importancia. Además, Araóz indicó que quedó secuestrado el libro de registro de pases, donde consta que las mujeres trabajaban exclusivamente para Díaz y que lo hacían los siete días de la semana. “Las mujeres estaban en una situación de extrema vulnerabilidad. Todo eso nos lleva a enmarcar el hecho como un delito de trata de personas”, remarcó el letrado.

Consultado sobre por qué la investigación demandó tanto tiempo, Aráoz respondió: “el ‘clan Díaz’ hace 15 o 20 años que maneja a mujeres en la provincia para explotación sexual. Como un integrante es ex policía, cuenta con toda la complicidad de la Policía y de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán. Por eso no llegábamos a buenos resultados con la investigación”. En ese sentido, el abogado de la fundación destacó: “ahora con Protex (Procuraduría de Trata y Explotación de Personas), Gendarmería y la Justicia Federal se hizo una investigación seria, que concluyó con los allanamientos del día sábado”.

“El local (’Night Club’) no tenía ningún tipo de habilitación. Por afuera no suponía ser un prostíbulo. Pero por información que tenemos, la Municipalidad y la Policía recorrían el lugar y de alguna manera lo protegían para que no se lo investigue”, insistió.

Por su parte, el abogado Carlos Garmendia aseguró que, no obstante la denuncia, la fundación también tiene algunos aliados tanto en la Policía como en la Municipalidad en su lucha contra la trata. Además, dijo que otros prostíbulos están siendo investigados. “La fundación no va a dejar de trabajar hasta que estén todos los proxenetas presos en Tucumán”, advirtió.