Una familia uruguaya pretende poner en marcha en Laciana una embotelladora de agua para explotar el manantial minero-medicinal de Rioscuro.

Con una inversión inicial de 4’2 millones de euros la empresa aprovecharía las antiguas instalaciones de la compañía Anaical y de salir adelante la iniciativa, la compañía generaría 25 empleos directos y 80 indirectos vinculados a sectores como la construcción, la logística o el turismo.

El manantial elegido no ha sido explotado industrialmente y destaca por la alta concentración en bicarbonatos y sulfatos, elementos adeduados para facilitar la digestión y para favorecer la depuración por lo que espera comercializarla en la gama premium de aguas. En todo caso, la iniciativa trata ahora de lograr lo más complicado: la financiación necesaria para adquirir la maquinaria cuya construcción no estaría completada antes de dos años según ha explicado su promotor Ricardo Bartorelli

Paralelo a la producción, la empresa impulsará la puesta en marcha del Museo del Agua en Villablino, un centro de interpretación de la hidrogeología de la zona y de la cultura en el medio rural. Se trataría de una ambiciosa propuesta que incluiría espacios 3D destinados a la divulgación científica y educativa

El proyecto cuenta con el respaldo del Ayuntamiento de Villablino, el Instituto para la Competividad Empresarial de Castilla y León, el SECOT y el grupo de acción local Cuatro Valles.