Exhaustos, con los últimos rugidos de los motores, los pilotos y los vehículos que sobrevivan al Dakar 2016 llegarán a Rosario el próximo 16 de enero. El Monumento a La Bandera será el punto de la ceremonia final del rally que se correrá en la Argentina y ésta vez integrará a Perú y a Bolivia. El evento fue presentado oficialmente ayer en la ciudad de Buenos Aires, donde la intendenta Mónica Fein puso de relevancia la "importancia" que tendrá para la ciudad.

La odisea, "The Oddyssey", llevará como nombre el octavo Dakar consecutivo que se correrá en la Argentina, que tendrá como punto de largada el 3 de enero a Lima (Perú), atravesará Bolivia, ingresará al país por Jujuy, luego Salta, Catamarca, La Rioja, Córdoba y entrará por el oeste a la provincia de Santa Fe hasta llegar a Rosario.

Autos, camiones, cuatriciclos y motos de 54 países participaron en 2015. Un número similar se espera para el próximo verano. La Argentina es el tercer país del mundo en aportar competidores, con más del 12 por ciento de un total de 664 (2015). De los cuales el 50 por ciento, en promedio, suelen completar la carrera.

Un buen lugar. "Cuando elegimos el lugar de llegada, no es sólo colocar una rampa para que acceden los vehículos y un podio para los ganadores. Se trata de que luego podamos contar una historia, una historia bonita, que tengamos una simbología, y sentimos que el Monumento a la Bandera es un muy buen lugar", le contó a La Capital Etienne Lavagne, director general del Dakar, que ayer condujo la presentación del megaevento en Buenos Aires.

Etienne Lavagne, francés y número uno del Dakar, aseguró que la elección de Rosario como lugar de llegada donde se levantará la bandera a cuadros a los ganadores el 16 de enero de 2016 se hizo porque "Rosario tiene una onda particular".

Para acompañar el anuncio de la puesta en marcha de un nuevo Dakar, también llegó hasta el predio de Costa Salguero, junto al Río de Plata en la ciudad de Buenos Aires, la intendenta Fein, acompañada entre otros por los secretarios de Turismo de la Municipalidad, Héctor De Benedictis, y de la provincia, Martín Bulos.

Por su parte, Salta también estará en el corazón del nuevo Dakar; será la sede del día de descanso intermedio que normalmente se programa durante la competencia. Para reforzar la relevancia que consiguió su provincia en el nuevo cronograma, Juan Manuel Urtubey, gobernador de Salta, estuvo ayer acompañando a los franceses del Dakar.

"Estamos haciendo gestiones para que el 10 de enero no llueva", bromeó el joven gobernador que acaba de ganar las elecciones primarias en su provincia con el 47 por ciento de los votos, y que quedó con un pie y medio colocado como gobernador electo para un nuevo período.

La nueva odisea se ordenará como un tríptico de Los Andes. "Vamos adquiriendo más refinamiento, conociendo el territorio, lo que nos autoriza movimiento más seguros, como el fakir que pisa su alfombra con pedazos de vidrio, o camina sobre brasas incandescentes", metaforizó ayer el muy activo Lavagne.

A su vez, Fein contó a La Capital que el Dakar en Rosario cayó muy bien, que trajo mucho turismo (en la versión 2015) en enero, un mes poco favorable para el movimiento en la ciudad.

"Para éste próximo Dakar vamos a trabajar para que el turismo que genera la carrera se complemente con otras ofertas que tiene la ciudad, que son compatibles", anunció.

La funcionaria, que _entre sonrisas_ descuenta continuará siendo la jefa política de la ciudad para el próximo 16 de enero, confió a La Capital que la decisión de elegir a Rosario como punto final del nuevo Dakar "la tomaron los franceses consensuando con el Ministerio de Turismo de la Nación. Queremos señalarlo, porque hemos sido beneficiados y será muy importante el evento para nuestra ciudad", destacó.