Poca fruta de carozo para cosechar en Río Colorado

Poca fruta de carozo para cosechar en Río Colorado
Las heladas de septiembre provocaron severos daños a la producción en la zona. Estiman que sólo quedó un 30% en las plantas y temen pérdida de empleo.
Las heladas de septiembre dejaron profundas huellas en la fruticultura de esta localidad, causándole millonarias pérdidas en la fruta de carozo, donde sólo quedó en pie para cosechar cerca de un 30 por ciento de toda la producción.

La reducida zafra que tiene fecha de inicio en pocos días más, tendrá un impacto económico directo en la comunidad, con la pérdida de puestos de trabajo de gran parte de las 3.000 personas que son ocupadas en cada temporada.

La jornada que provocó el dolor de cabeza a los productores fue la del lunes 23 de septiembre por una extensa helada que superó los 7,5 grados bajo cero.

Durante una recorrida por distintos establecimientos frutícolas de Colonia Juliá y Echarren y Colonia Reig, los propietarios coincidieron con los lamentos, "perdimos prácticamente todo. Fijate vas a ver poca fruta en las plantas, no vamos a poder sacar ni medio cajón".

Los daños por temperaturas bajo cero se dieron en el sector de los carozos (durazno, ciruela y cereza), aunque por las persistentes lluvias afectaron prácticamente toda la producción de manzana y no se descartaba que la pera tenga una merma.

Según los datos de la Cámara de Productores, las primeras variedades de cerezas tempranas comenzaban a cosecharse la próxima semana y según los relevamientos sólo alcanzaría un 20 por ciento de la producción, que tuvo que soportar fuertes heladas como intensas precipitaciones entre septiembre y octubre, que impidieron la normal polinización.

De esta manera las cerezas por segundo año consecutivo sufren importantes mermas y daños en la producción, y se suman a los datos estadísticos que indican que en los últimos 20 años, este frutal sufrió su novena temporada con pérdidas.

Otro desastre se produjo en los duraznos de las distintas variedades que maduran a mediados de noviembre. Hay pérdidas cercanas del 90%. Mientras que en las ciruelas que se comenzarían a juntar a mediados de diciembre las pérdidas llegan a superar el 80%.

"Este año el desastre fue general, lamentablemente este sufrimiento recaerá en todos, porque el carozo nos servía para mantener a la fruta de pepita y con la crisis que arrastramos será muy difícil sostenernos", comentó el presidente de los productores, Víctor Pardo.

Los técnicos de INTA consultados, mencionaron que además de las fuertes heladas que causaron los daños, el fenómeno se vio magnificado por la mala estrategia que se utilizó al momento de realizar las distintas defensas para prevenir los daños.

Otro inconveniente que se avizora, es la pelea que enfrentan los fruticultores con el gremio de los empleados rurales.

El responsable de la delegación de Uatre en esta localidad, Lorenzo Valdebenito, descree de lo sucedido en las colonia frutícolas y señaló que "No es del todo verdad las pérdidas que tuvieron".

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