No es el único formato que cambia, la botella de vidrio de 12 oz también cuenta con la misma forma en curva, y el logo estará rodeado de una gruesa línea plateada. Se espera que en 9 meses se hayan desplegado en EEUU los nuevos envases, cuyio diseño será aplicado a las marcas Pepsi, Diet Pepsi, Pepsi Max y Pepsi Next.

Al parecer este cambio de diseño es porducto del nuevo énfasis en el diseño que ha supuesto el nombramiento de Mauro Porcini como Chief Design Officer (CDO) en junio pasado.

Según portavoces de PepsiCo, la curva de la botella ha sido resultado de la actualización de antiguos envases de la marca. La curva es asimétrica con el fin de transmitir movimiento y alegría, lo cual es consistente con la imagen de Pepsi y el espíritu juvenil de la marca.

Este cambio en la imágen de marca se inicia en los envases, el elemento que más identidad da a la marca, pero con el tiempo este diseño trascenderá al envase y se aplicará a otros elementos de la marca.

"Comenzamos con formato individual, porque es el envase que la gente bebe y lleva consigo, está a la vista", explicó . "La visión a largo plazo es que este nuevo diseño finalmente vaya más allá del envase".

El equipo de diseño buscó la inspiración en los archivos de Pepsi

Angelique Krembs, vicepresidente de marketing para Pepsi, aclaró que el nuevo diseño de la botella así como cualquier cambio en la distribución no tienen nada que ver con la propuesta del alcalde de Nueva York Michael Bloomberg de prohibir a las bebidas azucaradas de más de 16 oz.

“Captura la emoción del momento” –una imagen cambiante

Pepsi se ha caraterizado por reinventar su marca cada vez que lo ha considerado necesario, a diferencia de Coca-Cola, que ha mantenido sus curvas y sus logos como iconos casi sagrados.

El último cambio en la imahen de produc to lo realizó Pepsi en 2008 cuando estilizó su globo con una estilizada sonrisa.

El nuevo diseño de la botella no tiene nada que ver con la propuesta de prohibición del alcalde de Nueva York

Ahora se ha aprovechado el cambio de eslogan para actualizar el diseño de la botella, un proiceso que ha llevado casi un año de trabajo y pruebas con los consumidores.

Con este cambio PepsiCo espera reanimar la marca, su confianza reside en la experiencia anterior con Mountain Dew, cuyo nuevo diseño animó las ventas.