El paro se sintió fuerte en la región

El paro se sintió fuerte en la región
Sin trenes, sin colectivos y con piquetes en diferentes arterias, el paro nacional se sintió fuerte en la región. Con escaso público, hubo actividad bancaria y muchos comercios igualmente abrieron sus puertas. El gobierno nacional lo calificó como “gran piquete”, mientras que los gremios opositores hablaban de “paro exitoso”. Hubo encontronazos en algunos locales gastronomitos de la región.
El paro nacional convocado por gremios opositores se sintió fuerte en la región en mayor medida por la parálisis del transporte público y por los piquetes llevados adelante por agrupaciones de izquierda que bloquearon accesos e impidieron la circulación de vehículos particulares, pero además se registraron algunos incidentes en locales gastronómicos.

Efectivamente, a eso del mediodía, un restaurant de Banfield que no se sumaba al paro recibió la visita de “una patota de seis hombres que llegó en dos autos. Nos amenazaron con golpear a los clientes si no cerrábamos”. Horas antes, una situación similar se dio en un local de Adrogue, donde una serie de encontronazos gritos, acusaciones y amenazas entre gremialistas y trabajadores dio intervención a la policía. Además, una fuente gremial reveló a LA TERCERA que “se invitó” a que un importante comercio gastronómico del centro de Lomas de Zamora cierre sus puertas, más allá de que el personal esté encuadrado en un sindicato “no adherente” a la jornada de protesta, y a que hagan lo mismo los propietarios de una cafetería de Temperley.

Más allá de estas situaciones en las que no se registraron personas heridas pero sí algunos destrozos, el punto más fuerte fue la ausencia de colectivos y trenes, situación que obligó a millones de usuarios de la región a no concurrir a sus lugares de trabajo.

Cecilia, trabajadora de la salud dijo a este medio: “La mayoría no fue a trabajar porque no podía viajar. Yo no m siento representada para nada por la CGT. Creo que Moyano `mima´ a sus nenes pero no representa a los trabajadores. Estoy a favor de los gremios y sindicatos combativos que peleen de manera real por los reclamos de los trabajadores, pero en contra de gremios que te obligan a parar. El paro de hoy es muy contradictorio y se nota en sus propias internas. Esto es un paro político”.

El anuncio ya desde temprano de una serie de piquetes llevados adelantes por organizaciones gremialistas de izquierda en la zona de la rotonda de Llavallol, en Hipólito Yrigoyen y Monteverde en Burzaco, Puente La Noria y Puente Pueyrredón, hizo que muchos vecinos desistan de la idea de trasladarse con vehículo.

Choferes de una agencia de remises de Lomas de Zamora, declararon a este medio: “No estamos trabajando ya que casi no hay actividad. Hay mucha gente que ya asumió que perdía su día de trabajo. Hoy vinimos todos los choferes a trabajar y la verdad es que casi nadie trabajó. Pensábamos que quizás iba a haber más movimientos para nosotros, teniendo en cuenta que los servicios de combis charter que vienen de Adrogué y los que salen de Lomas ya habían avisado que no trabajaron”.

Un rubro que trabajó, pero con escasa actividad, fue el bancario. “Los bancos cumplen con sus obligaciones. Si están bien administrados no deberían sufrir la falta de dinero. No tiene porque haber desabastecimiento”, dijo a este medio Eduardo Berrozpe, referente gremial. “Nuestro gremio nuclea a la actividad de todos los bancos y están garantizados para hoy –por ayer- todos los servicios. Lamentablemente no podemos encolumnarnos con la CGT de Moyano. Nos separamos por estas diferencias ya en el 2010.”

Instantes después del mediodía, desde el Puente Pueyrredón, Marcelo Ramal, legislador del FIT por la ciudad de buenos Aires, declaró: “Los cortes que estamos haciendo acá en Buenos Aires y en todo el país han contribuido a la contundencia de este paro y al mismo tiempo han subrayado un programa, un programa sindical, y un programa político.”

Capitanich: “Pretenden sitiar los grandes centros urbanos”

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, consideró ayer que los organizadores del paro nacional “pretenden sitiar los grandes centros urbanos” con “un gran piquete nacional y un paro de transporte”.

“Esa es una metodología a la vieja usanza del medioevo. En la Edad Media los señores feudales impedían el acceso a la población. No hay lugar para la barbarie ni para medidas que conspiran contra el libre ejercicio del derecho de huelga de los trabajadores”, dijo Capitanich en su habitual rueda de prensa en Casa de Gobierno.

En ese marco, consideró que con “un gran piquete nacional y un paro de transporte” se está “restringiendo la libertad de las personas” que quieren concurrir a sus puestos de trabajo. “El derecho a la huelga está consagrado en la Constitución nacional, así como el legítimo ejercicio por parte de los trabajadores. Lo que no se puede hacer es impedir el libre ejercicio de ese derecho de huelga”, dijo el funcionario.

Hugo Moyano: “No está previsto un nuevo paro”

El líder camionero, en una conferencia de prensa en la sede de la CGT, aseguró que la adhesión de la huelga alcanzó hasta el 98 por ciento. El sindicalismo opositor al Gobierno coronó la jornada de huelga con un acto en la sede de la CGT, encabezado por los líderes gremiales Hugo Moyano, Luis Barrionuevo y Pablo Miceli. “El paro ha tenido un acatamiento importantísimo y una adhesión importantísimo. En muchos casos supero el 98 por ciento. En el país ha sido una jornada muy importante y demuestra que cuando lanzamos esta jornada de protesta estamos interpretando lo que la gente quería expresar”, dijo Moyano.

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