En el caso de Puerto Madryn, los trabajadores se congregaron en la puerta del hospital Andrés Ísola, donde se mantuvieron protestando al ritmo de los bombos con la intención de visibilizar aún más el reclamo. Julio Belascuen, secretario de Organización de ATE Puerto Madryn, expresó: “Después de muchos días de conciliación obligatoria y de recibir nada, hoy estamos otra vez de paro, tratando de que dejen de burlarse de la salud y que realmente nos den un aumento acorde a lo que dieron en toda la provincia. Pero más allá de eso, no solo se burlan de nosotros, sino que también se burlan de la gente porque el hospital sigue en malas condiciones, no tenemos medicación, no hay como atender a la gente y siguen haciendo oídos sordos al reclamo, me parece que se olvidaron del pueblo”. Mientras dure la medida de fuerza, en el Ísola solo funcionarán los servicios de guardia e internación, mientras que los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS) permanecerán abiertos pero sin atención al público.

Chicana

Cuando la Secretaría de Trabajo provincial dictó la conciliación obligatoria luego de cinco días de paro, todo parecía indicar que el gobierno mejoraría la oferta de aumento salarial y que las partes llegarían a un acuerdo, pero nada de esto ocurrió. Desde ATE calificaron la conciliación como una “chicana” de parte de la provincia hacia los trabajadores: “El gobierno nunca cambió su postura y la poca postura que cambió tiene que ver con un índice que es de enero de este año, no es el índice actual, así que ni siquiera es un aumento, es un incremento del 1,6 por ciento. La conciliación obligatoria es nada más que una chicana que usa el gobierno para seguir dilatando esto de que no tiene plata, que evidentemente es cierto, porque no solo no arregla los sueldos de salud sino que tampoco arregla el hospital que hoy está deteriorado porque no tenemos quirófanos, no hay medicación, realmente no se acuerdan del pueblo. Acá es la gente la que está perjudicada, no por el paro nuestro, porque por más que estemos trabajando no tenemos con qué”, indicó Julio Belascuen.

Para largo

Si bien la medida de fuerza se dictó por 48 horas, probablemente la misma se extienda por varios días más, aunque eso se definirá en la asamblea que se realizará hoy por la mañana: “Haremos una movilización y en la asamblea los compañeros decidirán qué es lo que pretenden seguir haciendo después del día miércoles. Hay posibilidades de seguir con el paro, nosotros queremos que el gobierno nos escuche, si no nos escucha o no puede hacer nada el Ministro de Salud, que el Gobernador tome cartas en el asunto, porque si le dieron el ocho por ciento a todo el mundo por qué a nosotros no nos dan nada y encima los hospitales están así. Si esto de dejar el hospital de Madryn de lado es político, que lo digan, tienen que dejar de tener a la gente al descubierto porque eso pega fuerte en la política”, explicó el secretario de Organización de ATE.

Potenciado

La directora del hospital Ísola, Mónica Villaba, también se refirió a la medida de fuerza y fue crítica con los gremios por dos motivos: por un lado, una supuesta profundización de los reclamos de los sindicatos madrynenses, y por otro lado, por haber mantenido los CAPS cerrados en protestas anteriores. “La manifestación gremial y de los trabajadores en cuanto al reclamo salarial está más potenciada en este hospital, uno lo puede ver y lo puede sentir con respecto a los otros hospitales. Nosotros seguimos manteniendo los servicios básicos, hemos logrado consensuar con los gremios que no se cierren los CAPS, que es en algo en lo que yo no acuerdo en las manifestaciones pacíficas que podemos hacer como trabajadores. Los centros de salud necesitan estar abiertos para que cada uno como trabajador decida si se adhiere o no al paro, porque las cuestiones puestas por presión me parece que no van, y como uno respeta a las personas que se quieren manifestar y realizar un paro, los gremios y los trabajadores que hacen paro tienen que respetar a las personas que quieren trabajar”, explicó Villalba. Con respecto a los servicios que se encuentran funcionando en el nosocomio, la directora detalló: “En el hospital no funcionan los consultorios programados, lo que sí funciona es la atención por guardia porque no existe la retención de servicios en ese servicio. Le pedimos a la población que por las cuestiones que no son de urgencia o emergencia, que teóricamente se tienen que resolver en los consultorios programados, no sobrecarguen la guardia porque no es su función. Los turnos programados van a tener que reprogramarse para los siguientes días en cuanto se normalicen los servicios”.

Reunión suspendida

Para el día de ayer estaba programada una reunión entre los distintos directores y jerarcas de los hospitales provinciales y el gobierno provincial, donde se iba a analizar el recorte salarial que sufrieron dichos profesionales, de lo cual depende la continuidad de Mónica Villalba al frente del hospital Ísola, pero por la medida de fuerza que se realiza en los hospitales, el encuentro fue suspendido: “En realidad hoy iba a tener una respuesta, pero ante las circunstancias se suspendió una reunión que teníamos los directores, pero entiendo que se va a plantear en los próximos días. Hay un compromiso de parte del subsecretario de gestión Institucional, doctor Gioielli, en revertir esta medida. En tanto y en cuanto esto se resuelva me quedo, no tengo ningún problema en seguir, no voy a especular con la situación crítica, pero el tema salarial es una cuestión sine qua non para que siga en mi cargo”, expresó Villalba.