"Parece que estamos en el aire", dijo una de las operarias al hablar con Nuevo Diario, indicando que en una reunión mantenida con funcionarios del Municipio de Orán la semana pasada, estos les dijeron que ellos no dependen de la Comuna. Tampoco dependen de la Provincia, según lo explicado por el coordinador de Epidemiología, Alberto Gentile, quien indicó que si bien el Ejecutivo provincial baja los fondos, estos van por Asuntos Municipales a las comunas para pagar los sueldos.

Los trabajadores iniciaron los reclamos ante la falta de pago de octubre y noviembre. A ello se suma el irregular pago de marzo en el caso de algunos agentes, a quienes les pagaron 9 días en lugar de todo el mes.

La prevención se debe cumplir en el marco de una tasa de infestación del 19%, contra el 12% del año pasado.

Actividad insalubre

Los trabajadores además del necesario cumplimiento de los insumos con los que deben aplicar las sustancias para prevenir el avance de la enfermedad.

Indicaron que su labor es visitar 20 viviendas por día para realizar los trabajos de capacitación para el descacharrado, y disponer las sustancias que permitirán eliminar las larvas del mosquito Aedes Aegypti que es el que transmite la enfermedad.

El hecho es que, dijeron, algunos de los trabajadores presentar un estado de salud débil como vómitos, diarreas y erupciones en la piel al aplicar el hongo experimental. "El hongo no tiene ningún efecto sobre animales y personas", dijo Gentile al ser consultado, indicando que frente a las denuncias se dirigió a los médicos que atendieron a los trabajadores que presentaron los síntomas. Estos le indicaron que no había relación entre la aplicación del hongo y sus consecuencias en la salud. Sí indicó que son necesarios los guantes de látex y barbijos. El hecho es que los trabajadores sólo cuentan con guantes de limpieza, y les dieron barbijos sin las tiritas que les permitirían fijarlos a su rostro.

Hay una operaria a la que el médico le adjudicó intoxicación con el hongo experimental.