Omar Lacoste: “No hay presupuesto para ACUMAR”

Omar Lacoste: “No hay presupuesto para ACUMAR”

El titular de la Subsecretaría de la Cuenca Matanza Riachuelo dio a conocer que aún no mantuvo un encuentro con las nuevas autoridades del organismo y hay preocupación por la posible interrupción de acciones tendientes a combatir la contaminación y prevenir inundaciones.

Por Soledad Martínez.

Omar Lacoste, titular de la subsecretaría de la Cuenca Matanza Riachuelo y representante del distrito en el Consejo Municipal de la Autoridad de Cuenca del río Matanza Riachuelo (ACUMAR) manifestó su preocupación frente a la falta de presupuesto que garantice el correcto funcionamiento del organismo.

El funcionario reconstruyó: “ACUMAR, en una primera etapa, dependía de la Secretaría Medio Ambiente de Nación. En el resto del periodo, dependió directamente de Obras Públicas o del Ministerio de Infraestructura en su momento”.

Sobre la actualidad del ente, Lacoste explicó: “hoy claramente no tenemos ministerio, la secretaría está renunciante, está sin Cabeza o está alguien en la cabeza que no toma decisiones, aparentemente dependiendo del Ministerio de Economía, con todas las obras públicas a nivel nacional absolutamente paradas. Imagínate Cuál es la situación de ACUMAR que es un raviol dentro de ese gran monstruo”.

En este contexto, Omar Lacoste afirmó que la dependencia atraviesa “la misma situación que se reproduce en distintos organismos, no hay presupuesto para ACUMAR”. Además, el funcionario alertó: “se ha otorgado el mismo presupuesto que el año pasado, por lo cual operativamente no sé si alcanzará para pagar los sueldos del personal”.

Deudas y trabajos en suspenso

Omar Lacoste describió una de las situaciones que ejemplifican la falta de designación de recursos: el incumplimiento de pago a las empresas contratadas para trabajar en la recolección de residuos de los arroyos Morales y Don Mario.

En este sentido, el funcionario explicó: “en el municipio de La Matanza tenemos dos barreras de contención de residuos, una en el Morales y la otra en el Don Mario. Son barreras que contienen el ingreso de residuos sobrenadante, es decir todo aquello que flota, al cauce central del Río Matanza”.

Desde el mes de diciembre, las empresas que realizan este trabajo no perciben el pago correspondiente. “Son licitaciones que están en curso, les quedan dos años de contrato y están con bastante incertidumbre”.

Por otro lado, Lacoste resaltó que durante la gestión anterior, el organismo implementó políticas tendientes a atacar la contaminación de los arroyos y que “por otro lado, en La Matanza se ha trabajado desde hace muchos años profundamente en el tema de las inundaciones”.

El trabajo consistía en elaborar un plan estratégico para la limpieza de los arroyos, de los afluentes en lugares urbanos con maquinaria pesada. “Tenemos un problema que es más profundo, y es el tema de concientizar a la sociedad. Es un trabajo en el que estamos todavía bastante lejos”, expresó Lacoste.

Falta de conciencia ecológica

Para el funcionario “con las prioridades que tiene cada familia creo que se complica aún más, porque hoy estamos tratando de llegar muchos a fin de mes. Imaginemos tener conciencia ecológica o un trabajo sobre el tema de los residuos”.

Como consecuencia, los residuos terminan en el río, lo cual no solo lo tapa, sino que achica los cauces. Según manifestó el funcionario “en estos 4 años no hemos tenido ni evacuados ni problemas de inundación. Junto con el organismo hemos hecho un trabajo de planificación que dio un muy buen resultado, aunque aún falta mucho”.

Esta actividad se planificó en años anteriores en el mes de diciembre para ponerlo en marcha en marzo, pero hasta la fecha, Lacoste no ha tenido la oportunidad de reunirse con las nuevas autoridades del organismo. “Al saber que no tienen presupuesto, creo que se están preservando”, expresó el funcionario.

Este tipo de acciones están en suspenso y el funcionario señaló que “los municipios han tenido en los últimos años muchas delegaciones tanto provinciales como nacionales y en momentos tan difíciles como los que estamos viviendo y que se van a seguir profundizando los presupuestos municipales son muy magros. El bolsillo del municipio no está en condiciones de afrontar este tipo de trabajos”.

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