Novedoso programa de salud para jóvenes arroja buenos resultados

Novedoso programa de salud para jóvenes arroja buenos resultados
Se trata de un servicio de acompañamiento terapéutico. Se lleva a cabo desde hace un año y ya atendió a 30 pacientes. Es inédito en la Provincia.-
En Mar del Plata se puso en marcha un programa original. El Hospital Materno Infantil Victorio Tetamanti dispuso la incorporación de un equipo de acompañantes terapéuticos para apoyar a niños y adolescentes con diferentes trastornos disociales, conductas severas o situaciones de emergencia diversas. Casi un año después de efectuar sus tareas, planea ampliar las mismas e incorporar más personal.

"El director de este hospital tomó la decisión de encarar los problemas de salud de los niños y adolescentes en edad escolar de un modo integral y con un seguimiento personalizado", dijo María Eugenia Epele, jefa de Servicio Social.

Epele es una de las encargadas de llevar a cabo este programa y trabaja en intensa coordinación con Cristina Llorente, jefa del Servicio de Salud Mental y con Stephanie Schon, médica psiquiatra infanto juvenil. Todas son profesionales del Hospital quienes fueron entrevistadas por El Atlántico y dieron detalles del servicio que brindan a pacientes internados y ambulatorios.

"El abordaje del paciente no pasa sólo por el momento agudo" sino que se hace un "seguimiento luego de una internación y, para ello, el rol de los acompañantes es vital", precisó la jefa de la unidad de servicio social.

El equipo de acompañantes terapéuticos está formado por cuatro estudiantes avanzados de las carreras de psicología y terapia ocupacional que fueron formados específicamente para desempeñarse en esa función. Se incorporaron a fines del año pasado y desde entonces atendieron a unos 30 chicos en internación con distintas patologías y a un paciente durante un mes en situación de externación.

La jefa de Servicio de Salud Mental, Cristina Llorente, destacó "las ventajas del acompañamiento terapéutico y por sobre todo sus funciones, que son garantizar la continuidad o adherencia a los tratamientos, asesorar a las familias y ofrecer contención afectiva a los chicos con problemas de salud".

"Por el momento priorizamos a los pacientes que se hallan internados, debido a que es fundamental descomprimir y facilitar los procesos mismos de internación, que son de por sí complejos e intensos emocionalmente", agregó Llorente.

En tal sentido, Schon recalcó los objetivos principales del programa de acompañamiento. "Buscamos evitar la reinternación y en forma fundamental, bajar la medicación que reciben los niños". Aunque "no podemos con todo", reconoció Schon, se mostró conforme con los resultados obtenidos de acuerdo "a la disminución en la cantidad de días de internación de los niños y adolescentes y a la menor cantidad de medicamentos consumidos por los mismos".

Además, este programa ofrece una ayuda primordial a la psiquiatra al aportar evaluaciones socioambientales que permiten tener una visión más amplia de cada caso e ir adecuando los pasos terapéuticos a la realidad de cada niño.

Las tres responsables del programa destacaron que llevan adelante "un trabajo aceitado y coordinado" y reconocen haber puesto en práctica satisfactoria con este plan un "recurso valioso, aunque recortado aún, para la internación por problemas de salud de los chicos".

La edad de los pacientes a los que este programa acompaña se extiende desde los 0 a los 15 años y ha incluido en una oportunidad a una adolescente que poseía ciertas dificultades durante su embarazo. Aunque no es en la dirección inicial a la que se dirigen en su tratamiento, no descartan ningún caso que entiendan debiera ser atendido.

Además de patologías como la psicosis, los retrasos mentales asociados a problemas neurológicos o trastornos de la personalidad, "muchos chicos llegan con sintomatología psiquiátrica a partir de situaciones sociales hostiles", explicó Epele.

En esos casos, donde "prima la violencia, el abandono o la pobreza extrema, el equipo de salud debe articular sus tareas, trabajar en coordinación y realizar enfoques fragmentarios para que la rehabilitación tenga el mejor efecto en la salud de los pacientes", expuso la especialista.

Por otro lado, el hospital también trata de ocuparse en generar los nexos necesarios con los padres para poder descomprimir la relación de dudas que ciertas veces se crea entre los médicos y acompañantes para con los familiares de los pacientes.

"Nuestra idea no es, por supuesto, suplir a ningún miembro de la familia del paciente, sino sólo cambiar conductas y revisar lo que es transmitido a los niños por nuestra parte y cómo operan los padres paralelamente en cuanto a eso", aclaró Llorente.

Hasta hace pocos años, las soluciones que la psiquiatría ofrecía para los trastornos de diferente índole en los niños se limitaban a las internaciones prolongadas y al empleo de psicofármacos. "La gente siempre pensó que con tomar medicamentos la solución era posible y la recuperación más segura; estamos trabajando para que eso cambie" indicó, por su parte, Schon.

El nuevo abordaje de este programa, en cambio, privilegia internaciones no muy prolongadas y un regreso emocionalmente positivo al medio ambiente y la cotidianeidad del paciente, buscando la mejor reacción en la reinserción social.

En el proceso de rehabilitación se realizan paseos, juegos y actividades en las habitaciones de internación y se controla por muchas horas los posibles desbordes que pudieran tener los niños. En este nuevo contexto, "el acompañante terapéutico sirve como contención del paciente dentro y fuera del hospital", destacan las especialistas.

La planta de recursos humanos dispuesta para todo este trabajo se encuentra compuesta por 22 personas, 10 de ellas residentes que realizan un postgrado de tres años en trabajo social.

La jefa del Servicio de Salud Mental se interesó en destacar que "aquí no se trata de la existencia de un área de psiquiatría, ni atender situaciones de exceso en las complicaciones de los niños, no es un hospital psiquiátrico". "Nuestra intervención –añadió- se decide según la cobertura de internación que dispongamos para con los pacientes que ingresan". Y agregó: "Por eso es tan destacada la incorporación del equipo de acompañamiento terapéutico, ya que ahora sabemos más sobre los chicos fuera del hospital, los vínculos con los que se encuentra en su casa y los acompañantes nos aportan información fundamental para mejorar el tratamiento".

Comentá la nota