Niños que beben agua con arsénico en el chaco salteño

Niños que beben agua con arsénico en el chaco salteño

 El 4 de abril llegarán los equipos de filtración para la escuela de Pelícano Quemado.

El pasado viernes, el coordinador del Fondo Integrado para el Desarrollo (FIDE), Eduardo Oliva, confirmó a El Tribuno que el 4 de abril llegarán a Salta los módulos que se instalarán en la escuela de Pelícano Quemado para asegurarles agua libre de arsénico en ese paraje de Rivadavia Banda Sur. En la partida vendrán equipos similares para Tolloche (Anta).

Comunidades rurales y establecimientos escolares dispersos en el chaco salteño dependen de pozos con concentraciones de arsénico que exceden hasta en 74 veces el valor máximo recomendado por la OMS. Es el caso de Nueva Población y la escuela de Pelícano Quemado, ubicada a 50 kilómetros de la localidad cabecera de Rivadavia Banda Sur. En la zona, la contaminación de los pozos con la citada sustancia tóxica y cancerígena, fue estudiada por Mónica Farfán y otros referentes del Instituto de Investigaciones en Industrias Químicas (INIQUI) de la UNSa y el Conicet.

El 26 de octubre de 2016, este diario expuso los alcances de aquellas investigaciones que avanzaron inclusive hasta el desarrollo de módulos filtrantes de simple diseño, bajo costo y fácil mantenimiento. Los prototipos, sin embargo, no despertaron en los despachos estatales interés suficiente para ser aplicados en las poblaciones que tienen sus fuentes contaminadas con el lento veneno en la Puna, Rivadavia, Anta y la segunda sección de Rosario de la Frontera.

El informe que publicó El Tribuno en octubre de 2016, con los testimonios de familias lugareñas marcadas por el Hidroarsenicismo Crónico Regional Endémico (HACRE), movilizó al CIFAL, un centro internacional que depende del Instituto de las Naciones Unidas para la Formación y la Investigación (UNITAR), a firmar un acuerdo de cooperación con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y la cartera de Ambiente y Producción Sustentable de la Provincia.

En junio de 2017, en el marco de ese entendimiento, la Secretaría de Recursos Hídricos de Salta dispuso la perforación de un nuevo pozo y la construcción de un tanque de almacenamiento en la escuela de Pelícano Quemado. La empresa Aeropuertos Argentina 2000 participó del acuerdo con el aporte de materiales. Los trabajos se completarán en pocos días con la instalación de los módulos de filtrado que funcionarán con energía solar.

Las obras que están en camino

Con recursos financieros internacionales, nacionales y provinciales, se ejecutan actualmente en distintos puntos de Salta obras de infraestructura de agua y saneamiento por $2.000 millones.

A la par de los proyectos que contrató Aguas del Norte, por alrededor de $1.700 millones, hay otros que se canalizaron a través de las secretarías de Recursos Hídricos y Obras Públicas, como el nuevo acueducto que abastecerá a la localidad de San Antonio de los Cobres desde El Acay, en reemplazo de fuentes con alto contenido de arsénico.

El presidente de Aguas del Norte, Lucio Paz Posse, señaló que hay proyectos ejecutivos por 800 millones de dólares. Entre los que están iniciados, el funcionario destacó el acueducto que abastecerá a la zona norte de la ciudad de Salta y Vaqueros desde el dique Campo Alegre. “El proyecto, que incluye una planta potabilizadora, tiene estimados 50 millones de dólares de inversión y 100.000 beneficiarios”, precisó Paz Posse.

En la capital, también se ejecuta la undécima colectora máxima, con un monto de contratación de $152 millones. El punto más crítico del sistema cloacal de la ciudad de Salta está en la superada planta depuradora de la zona sur, que fue diseñada en los años ochenta para tratar los efluentes de la mitad de la población actual.

En el interior, grandes ciudades arrastran problemas crónicos en el servicio de agua potable. Muchas localidades carecen de redes cloacales y sistemas de tratamiento adecuados. En Santa Victoria Este, localidades de San Martín y Rivadavia ubicadas sobre la ruta nacional 81 y en Rivadavia Banda Sur se ejecutan actualmente obras de agua, redes cloacales y sistemas de tratamiento con lagunas de estabilización a través del Plan Hábitat.

En Tartagal, donde los cortes de servicio son permanentes, Aguas del Norte contrató obras por más de $147 millones con recursos del Plan Bicentenario. El proyecto en ejecución comprende al acueducto Yacuy-Tartagal, una nueva cisterna en Villa Güemes y obras complementarias.

En San Ramón de la Nueva Orán muchos barrios tienen el mismo problema crónico. En otros municipios de ese departamento, en más de una escuela, el suministro vital para maestros y alumnos depende de canaletas que cosechan agua de lluvia para evitar que beban de pozos contaminados con tóxicos cancerígenos como el arsénico.

Distintas localidades oranenses tienen iniciadas obras de agua y cloacas. En el largo listado de soluciones pendientes, la nueva planta depuradora de la ciudad de Orán es una de las más reclamadas. El proyecto, previsto originalmente en el Fondo de Reparación Histórica (FRH), sufrió un largo retraso por problemas relacionados con la ocupación del sitio de emplazamiento de los nuevos sistemas de tratamiento y colectoras complementarias. En estos días, con los inconvenientes superados y más de $37 millones asignados a través del Plan Bicentenario, la empresa Constructora Norte comenzó a mover sus equipos en espera de la aprobación de las certificaciones ambientales.

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