Todavía no hay mayores indicios tras el asesinato de Tristán Ventimiglia, abogado de 58 años, en su estudio jurídico de Catamarca 2189, entre Bolívar y Colón, en la mañana del último viernes. Solamente se sabe que fue ahorcado con su propia corbata y que el testigo que lo encontró sin vida fue el mismo que vio salir corriendo a una persona de “unos 30 años” de la puerta principal.

Mientras tanto, el fiscal Mariano Moyano que no se descarta ninguna hipótesis en relación al asesinato y dijo que sería una sola persona la que cometió el crimen. “Es un hecho realmente complejo para investigar, uno tiene que ser muy prudente en esta instancia de investigación. No tengo hoy por hoy algún elemento objetivo que me dé cuenta de afirmar determinado móvil”, explicó el letrado.

En el marco de una “muerte violenta”, Moyano acotó que “más allá de los golpes en la zona de cuello, la cara tenía heridas punzocortantes”. Posteriormente agregó que “lo que hay como dato objetivo es el testimonio de un colega de Ventimiglia que tenía que encontrarse con él para una reunión y observó salir a la carrera a un sujeto de 1,80 metros de altura, contextura robusta, pelo negro, en dirección hacia La Rioja. Por ubicación del testigo podemos sospechar que habría intervenido una sola persona”.

En el final del diálogo con Radio Brisas, Moyano afirmó que “hay una cámara que apunta el lado donde se fugó el autor, contamos con algunos de esas imágenes y se hizo un relevamiento para obtener más imágenes de filmaciones en comercios y edificios de la zona céntrica”.

Por último, dijo que “los procesos que tenía a cargo eran en materia de actividad comercial, y no encontramos ninguna causa extraordinaria que nos haga pensar que por uno de esos procesos ocurrió todo”.