$2 millones para una fábrica de pellets que hoy no existe

$2 millones para una fábrica de pellets que hoy no existe
La industria maderera pasa por un momento difícil por varias causas, entre ellas la falta de una política forestal e industrial por parte del gobierno que aseguren un crecimiento del sector.
Muchas empresas decidieron cerrar por falta de expectativas hacia futuro y las que hoy están trabajando se limitan a producir materia prima para la provincia del Chaco.

Sobre la situación que viven muchas empresas dedicadas a la industria maderera, dialogó con Radio Uno y El Comercial el Diputado y empresario maderero, Miguel Ángel Ventimiglia, que fue consultado sobre como se encuentra actualmente la industria maderera provincial.

“Nosotros teníamos muchos empleados, ocurre que estamos complicados desde hace tiempo. Venía diciendo hace tiempo que íbamos a tener un problema a corto y mediano plazo”, afirmó el entrevistado que resaltó que al no establecerse por parte del gobierno “ninguna” política forestal ni industrial en la provincia, se generaría así que muchas fabricas y carpinterías iban a cerrar y se iban a caer varias inversiones destinadas al sector.

“No se ve futuro por parte de los inversores. No hay una política de que es lo que se quiere hacer”, resaltó que años anteriores habían ofertas para ubicar los productos formoseños en el exterior pero que actualmente toda operación se refiere a emprendimientos menores: “Ahora todo se resume a un conjunto de consorcios que esperan a que el gobierno haga amoblamientos escolares para que tengan trabajo dos o tres meses en el año”, lanzó el radical.

Agregó que muchas empresas han perdido gran cantidad de clientes debido al avance de otras empresas radicadas en Chaco, Santiago del Estero mientras que en Formosa, según dijo, solo se aporta la materia prima para fábricas instaladas en otras regiones del país.

“La maquinaria instalada está trabajando en un 50% y en este momento estamos contando entre 50 y 60 trabajadores en actividad”, dijo Ventimiglia que admitió que se llegó a contar con más de un centenar de trabajadores del sector. Afirmó que no hay una educación para que los jóvenes tengan una preparación para las nuevas tecnologías para el sector: “Las nuevas maquinarias no llegan porque no hay quien se haga cargo de ellas. Se hace muy costoso la reparación y puesta en funcionamiento de las mismas porque uno debe manejarse con representantes y revendedores del extranjero”, explicó.

Remarcó que actualmente, muchos emprendedores cierran sus puertas debido a la falta de expectativas para inversión en nuevas empresas: “Para que se va a invertir si no se sabe en que se va a invertir la materia prima. Todavía no se determinó que lo que es industrializable pueda entrar al circuito económico de la provincia”, resaltó que un porcentaje del terreno desmontado debe ser repoblado por parte de los responsables y pidió una legislación al respecto.

Fábrica de pellets:

“Una mentira mas”

Al ser consultado sobre la anunciada instalación de una fabrica de pellets de madera, Ventimiglia afirmó que dicho anuncio se trata de “una mentira más” mientras se sumergía en cuestiones políticas: “Prácticamente dos veces se inauguró una fabrica de pellets en Palo Santo que es el principio de la biomasa para buscar energía alternativa y ahora hay solamente un tinglado”, dijo y relató que la fabrica “se va inaugurando de apoco”.

“Hay muchas cosas que parece que funcionan, la gente cree que se traba allí pero no hay nada de eso. Lo mismo pasó con el CEDEVA para sus instalaciones e hicieron su publicidad de que invirtieron 60 mil euros para un centro importante para el sector forestal. Eso nunca existió”, dijo sobre otro anuncio gubernamental que no se habría concretado.

Indicó que ya es habitual que el gobierno informe durante varias semanas sobre emprendimientos que reciben inversión pero que nunca se concretan en trabajos: “Hay fabricas que se anunciaron y no existen, no se que pasó con ese dinero invertido y se puede ir a ver que no hay ninguna fabrica”, dijo mientras agregó que se trataba de un proyecto de suma importancia ya que emplearía a muchas personas y que se concretaban con los residuos de la operatoria de muchos aserraderos de Palo Santo.

“Se iba a hacer un aprovechamiento total de la materia prima”, dijo. Ventimiglia indicó además que “una cosa es el relato y otra la realidad”.

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