Un médico que atiende en Merlo y en San Luis seguramente llamó a la policía porque él estaba perdiendo a clientes que les dejaban todos los meses entre 400 y 500 pesos. Yo tengo cremas sin registrar, pero no vendo drogas. Curo la psoriasis con cremas y dietas”, así descargó Diana María Rebechi, más conocida como María Diam, frente a la causa judicial que sospecha de ejercicio ilegal de la medicina y venta no autorizada de medicamentos.

El jueves 10 de octubre la Policía Federal llegó con una orden para allanar su casa ubicada en la “vieja ruta 1”, en Piedra Blanca, a 15 kilómetros de la villa turística, de donde secuestraron equipos y pomadas.

Para María Diam, el operativo fue alentado por un médico de Merlo que había perdido muchos pacientes por su tratamiento. Y si bien no quiso revelar su nombre, dijo que trabaja en el Centro Integrador Comunitario (CIC).

“No duden, porque sí encontré la cura a la psoriasis (enfermedad crónica de la piel que produce lesiones escamosas). Podrán poner en duda todo lo demás, pero estoy siendo castigada por un médico que atendía a la gente y los engañaba. Pero los pacientes tienen las pruebas para demostrarle a este señor qué les estaba dando. Yo no puedo medicar porque no soy médica. Pero sí curarlos con cremas”, aseguró Diam, quien afirma ser una bióloga dedicada a encontrar respuestas a los problemas en la piel: “Soy una investigadora que trabaja día y noche. En estos días tuvimos un avance enorme para el vitíligo (enfermedad degenerativa de la piel que produce manchas). Y la última prueba que sacamos es que puede volver a su color normal. Es decir, me podrán llevar las computadoras y los papeles, pero mi cerebro sigue trabajando”, manifestó con orgullo.

Frente a la causa judicial, la bióloga contó que la estrategia que plantearán con los abogados apunta a demostrar la eficacia de la pomada, por lo que llamarán a químicos y especialistas para autentificar la cura definitiva a la psoriasis, lo que avalan sus clientes.

Diana María Rebechi llegó a Merlo de la mano de Julio Falco, quien la invitó a actuar en la obra “Romeo y Julieta”. “De joven fui actriz, y por eso di vuelta el nombre para que quede María Diam. Pero no es más que eso. Ya le entregué todo a la Justicia para que compruebe todo lo que necesite, porque mi familia también está viviendo un momento espantoso. Pero yo no puedo abandonar a mis pacientes, no los puedo dejar, porque están en pleno tratamiento”, expresó.

A través del “boca a boca”, las redes sociales y su propia fundación, las cremas traspasaron las fronteras para ser distribuidas por distintos países, como Chile, Paraguay, México, Estados Unidos, España, etcétera.

“Psoriasis. Quiero terminar con esta enfermedad, que es el padecimiento de 200 millones de personas en el mundo. Hay una cura, créanlo. Inmunizamos tu piel. Créelo, de ti depende”, anuncia en la página web de la Fundación Psoriasis María Diam y en su cuenta de Facebook.